Japonesa Bella 685639564
 

Y esta asiática ¿Qué tal?

Hola, estuve a mediados de junio con ella. Las fotos son falsas y ella es china, no japonesa. Desglose:

Nombre de guerra: Bella
Nacionalidad: China
Forma de Contacto: Pasion.com
Hilo profesionales:
Web profesional:
Fecha aproximada: junio 2018
Lugar: Irún, Behobia. Apartamento muy discreto.
Instalaciones: habitación amplia con ducha fuera
Higiene: bien, tanto ella como la habitación.
Precio: 100/hr, 50 media
Edad: yo le echaría entre 30 y 35
Cara: guapilla. Asiatica sin rasgos excesivamente pronunciados.
Pelo: largo, negro
Cuerpo: delgada, durito
Pecho: pequeños pero bonitos y naturales
Culo: prieto y durito. Para mí muy bonito.
Piercings y tattos: en la base de la espalda
Defectos corporales: algo de barriguita
Actitud: buena y atenta
Conversación: habla muy mal castellano
Besos: si, con lengua (sin profundizar demasiado)
Fuma: no creo
Francés: sin y muy rico
Forniqueo: bastante bien, se adapta a lo que le pidas
Griego: no hace
Lo mejor: se adapta sin imponer
Lo peor: se cansó relativamente pronto. Algo relojera.
¿Repetir? No
¿Recomendable? no está mal pero no es para echar cohetes.
Valoración global de la experiencia: 6,5

Relato:
Quedo con ella por teléfono y ya me escamó su acento, que no parecía japonés. Habla muy mal castellano. Llego al apartamento pensando a ver qué me encuentro y me abre la puerta una joven delgada, agradable, que me da dos besos muy cariñosos, así que alea jacta est y para dentro.
Acordamos un ahora, pone sábanas limpias y entramos a la faena: besos, caricias. Al rato con el francés, rico. Finalmente pasamos al fornicio, ella encima, misionero por delante, por detrás, a cuatro patas. Su actitud es buena y coopera. Al rato ya estábamos chorreando de sudor (hacía bastante calor en la habitación) y volvimos al francés, manual. Conversación apenas hubo.
Llevaríamos 45 minutos cuando ya empieza a comentar que está muy cansada, que ya se va acabando el tiempo... Al poco lo dejamos, me ofrece papel de cocina para secarme el sudor y nos despedimos con un beso. Cuando salí y miré el reloj habían transcurrido 55 minutos.

Resumiendo, una experiencia que, sin ser mala, tampoco fue para enmarcar. La sensación final fue de 100€ mal aprovechados.