Cuales pensáis que son los miedos en el ambiente putero.
Miedo por ser vistos por vuestros conocidos.
Miedo a pegar el gatillazo.
Miedo a que la chica no cumpla.
Miedo a las enfermedades.
Miedo por la pasta que gastas y no saber como justificar con la parienta.
Miedo a no poder repetir esa experiencia tan maravillosa.
Miedo a enmorarte.
Miedo.....a que
1º A ser visto, reconocido por algún familiar/conocido.
2º A pillar algo. Lo veo dificíl, pero me como el tarro.
3º A gastar mucha pasta, a pasarme.
4º A pasármelo demasiado bien.
Cuando iba de lumis mi único temor como putero era que mi lumi de cabecera se retirara, se fuera a su país y perdiera contacto con ella...
Fueron muchas, con algunas aún mantengo comunicación y no vean qué alegría se siente cuando de la nada surge una llamada desde Escocia, o un email desde Rusia, o te la encuentras en el chat desde Colombia, Perú, Argentina o Rumanía...
Mi único temor: terminar siendo esclavo del sexo de pago. Que esta afición mía tan agradable y placentera se convierta algún día en un vicio al que no pueda decir que no.
Mi único temor: terminar siendo esclavo del sexo de pago. Que esta afición mía tan agradable y placentera se convierta algún día en un vicio al que no pueda decir que no.
Estoy de acuerdo contigo. Me preocupa pensar que algún día esto se pueda convertir en un vicio que no pueda controlar y hacerme un lumiadicto y que esto deje de ser algo divertido.
Cuando iba de lumis mi único temor como putero era que mi lumi de cabecera se retirara, se fuera a su país y perdiera contacto con ella...
Fueron muchas, con algunas aún mantengo comunicación y no vean qué alegría se siente cuando de la nada surge una llamada desde Escocia, o un email desde Rusia, o te la encuentras en el chat desde Colombia, Perú, Argentina o Rumanía...
Saludos, Santo Oficio
A mi también me pasó algo parecido.
Cuando dejé de ir de lumis (de esto ya hace, casi, 14 meses) seguí manteniendo contacto con mi lumi especial (pudo llegar a más pero siempre fué una lumi conmigo, en eso no me engañó).
Cada vez que recibía un email suyo me llevaba un alegrón...me decía unas cosas preciosas.
Tiempos aquellos...