Ramón Luján 632447597

He visto este anuncio y no me suena y metiendo el teléfono en el buscador tampoco me sale nada, si ya tiene hilo pido disculpas, no lo he encontrado. Parece ser un local puerta calle, por Usera, me dicen que son tres chicas y los precios 20 minutos 30€, 1/2 hora 40€ y la hora 70€, un saludo.

Táchalo de la lista. Un desastre de piso. Orcos totales. Olvídalo.
Yo fui y me presentaron dos. La morena parecía que podía tener buen cuerpo, les pedí que se quitaran las mascarillas y elegí a la otra porque era muy fea, pero muy fea.
La otra, con más de 40, en cuanto se desnudó me di cuenta de mi grave error.
Se lanzó a chuparla con ganas, pero al cabo de un par de minutos, me dio tanto asco, que me vestí y salí pitando.
De los peores sitios donde he estado.

Pues yo creo que de este bajo ya dejé yo una primera impresión, justo antes del Covid.
La china que me atendió era la que hacía de mamasan, que aunque era mayor estaba buenísima, cara de +30 cuerpo de 25.
Me contó que era de padre japones y madre china, hablaba algo español y la habitación en la que me atendió en un par de ocaasiones apenas entraba la cama, pero la tia se lo curraba que daba gusto.
Después vino el rollo del covid y aprovecharon para hacer reformas en el local, pero si por lo que dice el compañero ha sido para dejarlo peor, pues vaya una reforma de Manolo y Benito.
por cierto de los pocos sitios de chinas que la tia me cobraba despues de terminar, así me quedaba de verdad el tiempo que me apetecía dependiendo de como fuera el encuentro.

Te acuerdas de como se llamaba o como era físicamente? Alta, baja, morena.. Etc

Claro, más o menos, porque el confinamiento cerro como dije, Era alta para ser china, yo creo que 170 cm., monera, media melena y un cuerpo bastante bonito, su edad rondará los 35 o más, pero su cuerpo parecía de una chica de 25 piernas preciosas y piel suave.

He estado por allí muy recientemente.

El piso es un bajo con acceso directo desde la calle, en pleno corazón de Usera (difícil de aparcar pero a diez minutos andando de los metros Almendrales o Usera). Es muy poco discreto porque la entrada está pintada de color amarillo chillón y con motivos orientales (las imágenes de Google Street View no la muestran en todo su esplendor por no estar actualizadas), todo el barrio sabe a lo que vas.

Una vez dentro, es el típico antro chino, como el de la calle Hortaleza pero con muchos menos metros cuadrados y una decoración muy peculiar. La distribución de habitaciones es muy rara, separando algunos espacios mediante cortinas, hay enredaderas y plantas de plástico por todas partes y como nota curiosa, el suelo del baño es de moqueta y no ví ducha. La habitación donde fui atendido es una habitación normal (con puerta normal y pestillo), muy pequeña pero funcional y cálida gracias a un radiador que estaba a toda potencia.

Me recibe la dueña, una señora que ya no cumple los 40 pero que aún está de buen ver. Por teléfono y luego en persona me pareció fría y poco amistosa, me preguntó que cuanto tiempo y le dije que se lo decía en cuanto me presentase a las chicas. Se ofreció ella misma y me presentó a una tal Mimi, mucho más simpática y sonriente que la dueña y bueno, ya que estaba allí me quedé para una hora. Curiosamente, la dueña cambió de actitud completamente en cuanto pagué (nunca fue mala o desagradable, simplemente parecía estar un poco a la defensiva). Sospecho que deben de estar hartas de recibir a gente que se va sin contratar a ninguna de las chicas.

La tal Mimi tendrá alrededor de 30 y tantos, delgada, con pechos naturales de la 85a aproximadamente y pelo largo recogido en una coleta. No es desde luego el típico pibón chino que uno siempre busca, pero destaca su buena actitud desde el primer momento, quiere agradar y ser simpática y la verdad es que lo consigue. Tiene muy buena técnica de francés, se presta a lo que le pidas y da todos los besos que quieras.

Tras una felación muy satisfactoria me dió un espléndido masaje, mejor de lo habitual, y cuando quedaban unos quince minutos me preguntó si no iba a querer mas sexo, así que por aquello del qué dirán me puse manos a la obra y echamos un polvo en posición misionero tras unos breves preliminares.

En general, me fui contento, pero no es nada del otro mundo. La implicación de la chica y su buena técnica de masajes contrarrestan la falta de juventud y buenas instalaciones.