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Se anuncia en El Mundo como masajista 600086525, por teléfono promete un buen masaje y si hay "filin"... la voz ya me había tenido que prevenir sobre la edad real y el discurso sobre el estado de la sesera. Recibe en unos apartamentos de alquiler diario, el suyo algo destartalado como el sofacama. 100 la hora y 70 los 45 minutos, arreglo 50 por 30 porque me huelo el pastel. Tiene operados los labios, el culo duro y los senos pscha, cara de lucio viejuno, confiesa 44, les resta al menos 15, Las fotos del anuncio ha debido colorearlas a mano, es una señora típica del bingo que ha visto años mejores pero hace la tira. En fin, se desviste y se pone una bata de enfermera con la manga descosida, me pide que me tumbe boca abajo y dice que me masajea (en realidad me toca dos minutos el culo y los huevos), dictamina que ya es suficiente y que me de la vuelta, comienza con un frances sin, empiezo a meterla mano y responde bastante bien a la fricción, se excita y empieza a fantasear con un diálogo del tipo "doctor, doctor, necesito que me ausculte y similiares", me da la risa, me dice que le recuerdo a su primo y que lo hacían en el pueblo a escondidas, ya me parto, se restriega (mejor que el condón que es muy artificial) y dice que se corre a los dos minutos. Me aplasta y me cuenta lo de un amante de bilbao. Vuelve al frances y recibe en boca y a la carrera al baño. Vamos que como una chota. Osea que para nada.
Yo es que soy muy educao y a las señoras un respeto pero esta tiene un cuento del 15.
Los siguientes 2 Usuarios dan las gracias a demasiadoserio por este Post:
Pues sí que va a ser, sin gatos, pero con el mismo pinzamiento mental. Que cutre demencia. Si se quieren unir hilos mejor, pero haciendo constar que ahora recibe en c/ Almagro ( no sé por cuanto tiempo dado que son apartamentos turísticos) no vaya a ser que la gente crea que ésta es otra. Y les de por ir.
Gracias Estanes por localizar antecedentes, en esta tía a todas luces delictivos.
Lo peor es que tras haber acordado un precio me intentó subir la cuota, a lo que me negué.
Se hace llamar Claudia y suscribo plenamente la experiencia. El detalle de la bata me asustó.
La verdad es que la mujer de las fotos sí que es ella, pero hace 30 años... o más.