Cataleya Jerez
 

Nombre de guerra: Cataleya.
Nacionalidad: Colombiana.
Forma de contacto: 604385728
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Fecha aproximada: Hace unos días.
Lugar: Jerez Sur, cerca de MaxiDIA.
Instalaciones: Chalé conocido, fácil aparcamiento. Discreto según la hora a la que vayas, lo mismo que pasa con el de calle Aluminio.
Higiene: Buena.
Precio: 60 euros media hora 120 una hora
Edad: 26 dice el anuncio. Tal vez sí, quizá uno o dos más, como mucho.
Cara: Mona tirando a guapa, para mi gusto. Como es simpática, sonríe bastante y eso ayuda más.
Pelo: Negro, como toda ella.
Pecho: Tirando a grande, un pelín colgante pero bien.. Pezones normales.
Culo: buen culazo colombiano y de café olé. respingón, grande y durito.
Piercings y tattos: Alguno, nada cantoso.
Actitud: Muy educada, un pelín cortada al principio; gana confianza cuando le das algo de cnoversación.
Besos: No los da, pero yo le conseguí alguno.
Fuma: No creo.
Francés: Ensalivado y bastante bueno, pero yo no quería terminar así cuando la vi.
Forniqueo: bueno. Se mueve muy bien arriba.
Griego: no deja que le metan ni el pelo de una gamba.
Lo mejor: Simpatía y su culo. Bueno, y esos labiazos preciosos que tiene.
Lo peor: hay que pagar.
¿Repetir? no suelo repetir, pero aquí me lo estoy pensando.
¿Recomendable? Sí.

EXPE. Llegué hasta los huevos de playeo ese día, y la parienta el doble que yo. Críos insoportables, pero cuando llegaron eran unos zombis. A eso de las dos de la mañana, estaban todos sopas. Yo, con la excusa de sacar al chucho y ver la peli, me quedé un rato en el salón. Y tras sacar al chucho, le llamo y pregunto "¿se puede?", y me dice que claro, que adelante, y agarro la moto y tiro para allá, que estaba a cinco minutos. Me recibe una ogra que me pide primero que afloje la mosca, me llevan a una habitación con espejo y aire acondicionado en modo Círculo Polar, y entra ella. No sé si es la de las fotos, porque desde luego, puede serlo, aunque están algo retocadas. Pero el tipo que luce es parecido. Vengo duchado de casa, le informo, así que se limita a darme con toallitas. Presentación, charlita y le digo de comerle los bajos yo a ella primero, a lo que accede gustosa. Coñito depilado y riquísimo; me dejó meterle dedos y le gustó. No sabría decir si llegó a correrse, pero sí que se meneaba como una culebra a cosa de cinco minutos. En un momento concreto, cambiamos a sesenta y nueve, y ahí me pongo morado de comer y de buenas vistas, mientras le agarro el culazo a dos manos y le separo los cachetes, porque es de esos que son tipo hucha y no dejan ver. En esa postura le entra mejor en la boca que sentada al borde de la cama -bueno, a ella y a cualquiera, claro-, y su mamazo llega más profundo. Cuando siento que su saliva empieza a resbalarme polla abajo hacia las bolas, empiezo a sentir que se me va la cabeza, y le digo que enfunde y que se la meta tal como está. Y me regala un cowboy inversa de lo más cañero, porque el culamen se le menea divinamente y, como se inclinaba hacia adelante, veía perfectamente cómo la polla se me enterraba en ese soberano coñaco. Le pido cambiar a ella de frente a mí, y sin sacársela, se da la vuelta y empieza a darme mandanga mientras me mira, todo el rato sonriendo. Consigo algún piquito y hasta algo de lengua. Le pido hacer cucharita, aunque sé que así no voy estar mucho rato porque llevo ya los huevos cargados de amor, y finalmente la empotro a cuatro patas, con vistas a un culo grande, bonito y que me recuerda a dos pelotas "Spalding" muy apretadas la una contra la otra. Plaf, plaf, plaf, plaf, yo aguantando el tipo lo que podía, y ella empieza a gemir, y yo que no aguanto más y me dejo en la goma hasta la última gota en ese café colombiano que se movió todavía más deprisa cuando supo que me corría. Charlita y para casa a toda hostia antes de que notaran que el perro estaba y yo no. No sé si se va a quedar mucho o poco, no caí en preguntarle, pero si dentro de un tiempo sigue aquí, le iré a pedir un café de sobremesa.