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Hola. soy mexicana de 22 años, mi nombre es fatima, una masajista muy diferente, masaje terapeutico combinado. todo un culto al erotismo, rompe con lo convencional y ven a visitarme estoy en mi apartamento, recibo sola. vive una experiencia inolvidable donde se combina el relax y la tranquilidad. atiendo de 14: 00/a 21: 00h; en Arturo soria (MADRID)
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Cansado ya de estafas y engaños con fotos falsas, aquí va mi NO experiencia de la semana pasada...
Un clásico: llamo al 611367134 y pregunto por Fátima, me contesta que es ella, le pido una cita para dentro de 20 minutos. Me da una dirección. Para allá que voy. A la hora convenida llamo y me guía hacia su edificio arriba indicado. Una vez dentro del piso, veo claramente que la chica no se parece en nada a la de los anuncios:
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Me contesta que es ella, le digo que si se llama Fátima. Entonces me responde que no, que Fátima se acaba de ocupar... Pero coño, si he llamado hace 20 minutos y reservado con ella. Total, que me controlo y le digo que ya volveré otro día...
Dándoles el beneficio de la duda vuelvo a llamar pasados unos días. Me contesta de nuevo "Fátima". Le pregunto si es ella. Me responde que sí. Le inquiero de nuevo si es la de las fotos del anuncios y se éstas son de verdad. Me responde con un "claro, cariño, ven y lo compruebas". Pues para allá que vuelvo a ir. Duré 1 minutos en el piso. Obviamente no es ella. Sí, se parece algo en el pelo rizado y en el blanco de los ojos... En lo demás es como si se hubiera comido a dos chicas como la del anuncio. Me reconoce que las fotos no son suyas, pero que se da un aire... Le respondo que claro, que yo también me doy un aire a Brad Pitt y con esas mismas me marcho.
Lo que me indigna ya no es que usen fotos falsas en ese piso, que parecía el típico sitio clandestino de varias masajista (rollo te abrimos sin responder al interfono, me escondo detrás de la puerta, luego miro por la mirilla para que no coincidas con ningún vecino... cosa que además estando donde está situado en el edificio el piso es complicado!) sino que tengan la desfachatez de hacerle perder el tiempo a uno cuando ha preguntado varias veces si las fotos son verdaderas o falsas y encima ya me habían hecho ir una vez para nada...
¡Avisados quedáis! Hala, al menos el cabreo rumiante que tenía lo suelto por aquí.