¡¡Malditos pistachos!!
-¡¡MALDITOS PISTACHOS!!-
Nunca, por más que viva, podré olvidar el fin de semana en el que ocurrieron los hechos que a continuación, paso a contaros, y que a partir de ese fatídico fin de semana, marcaron la rutina alimentaria de mi vida.
Como buen aficionado a los deportes de motor, estaba deseando que comenzara el campeonato de formula 1, cuya primera cita era en Australia la madrugada del sábado al domingo 29 de Marzo de este año. Pues bien, ante tal evento decido aprovisionarme de víveres, para pasar la noche despierto hasta la hora de la carrera, así que me encamino hacia el carrefour mas cercano y voy derecho hacia el pasillo de licores. Esta vez, en lugar de coger la botella de whisky mas barata (esa que escondes en la caja entre las bolsas de magdalenas, para que no la vea el cliente que va detrás tuya y te mire con cara de superioridad), whisky marca de importación escocesa "el tio de la gaita" de a 5,5€ la botella, decido tirar la casa por la ventana y agarro por el cuello, una de marca buena, buena: DYC, ¡¡por que yo lo valgo!!. Seguidamente voy al pasillo de los refrescos y hecho a la cesta una botella de dos litros de: "gold cola", y por ultimo una bolsa de 200 gramos de pistachos marca "carrefour".
Serian las 0,30h aprox cuando por fin me quedo solo en el salón de casa, con dos de las cosas que mas feliz me hacen en esta vida: mi tele de 32" con mando a distancia (detalle importante), y mi querido sofá de tres plazas en el que he hecho el amor conmigo mismo infinidad de veces viendo el canal "tele 7", unas veces con la derecha, otras con la izquierda, otras con un calcetín.............., mi amado calcetin.
Decido echarme un dyc-cola acompañado de un puñadito de pistachos y tomármelo tumbado en mi sofá, mi querido sofá, con el mando de la tele y el tabaco lo suficientemente cerca para poderlo cojer sin tener que levantar el lomo ni un milímetro. Al cabo de poco mas de media hora, decido repetir la operación, acompañado de los pistachos, que es el fruto seco que mas me gusta. Después de otra media hora larga, con el vaso vacío, no tengo mas remedio que levantarme de mi sofá (me estaba meando), al hacerlo noto un ligero mareo acompañado con perdida de agilidad visual, enseguida deduje que seria por la diferencia de altura (sofá a 30cm del suelo y yo 1.9m erguido), tendría eso que los alpinistas llaman "el mal de altura" y no le dí importancia. A la vuelta del baño me preparo otra copa, pero esta vez bien cargada, y mi puñado de pistachos, por supuesto, mientras en la tele el calvo de la sexta, ya está con el previo de la carrera una hora y media antes del comienzo de esta, así que decido que hoy no hay sexo, que esta noche el calcetín dormirá en el cajón de la mesilla limpio e impoluto, acompañado de su "par".
Cuando faltaba alrededor de una hora para que los coches empezaran a rodar, tenia el baso de nuevo vacío, pero esta vez solo me apetecían los pistachos, no me encontraba bien, tenia sueño, pero era normal serian cerca de la 4 de la madrugada, así que esta vez no hubo copa. Me ladeo ligeramente para cambiar de postura, y pierdo el conocimiento durante varias horas. En mi sueño podía oír ligeramente un pequeño zumbido parecido al de un moscardón, de esos que tienen pelos en la espalda y tatuajes en el hombro, pero posteriormente descubrí que era el ruido del motor de los coches.
Desperté al cavo de las tres horas, con un fuerte dolor de cabeza, el estómago revuelto y lo mas extraño de todo: era incapaz de despegar los labios para pronunciar una sola palabra mínimamente entendible excepto: ¡¡ A G U A !!. Cuando sacié mi sed, y gracias a mi licenciatura en biología, la cual conseguí presentando una tesis a la que llamé: " Cual fue el eslabón que falló en la cadena de la evolución de las especies, para que apareciera en el reino animal un ser como el oso hormiguero", llegue a la conclusión de que los pistachos son imcompatíbles con el dyc-cola, y estos deben de producir una reacción alérgica.
Después del fracaso de este fin de semana decidí imvestigar en el asunto, y ahora estoy seguro de que la culpa no fue de los pistachos, ya que se repetían los mismos síntomas con kikos gordos, almendras, panchitos y demás frutos secos, e incluso con con aceitunas. Ahora estoy centrando mi investigación en si el problema era por causa de la "gold-cola". Pero eso es otra historia.
Última edición por termita; 18-09-2012 a las 15:00
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