Cita a ciegas con un forero

Fue el azar el que hizo que nos conociéramos.

Un privado , una respuesta, otra más, te doy mi msn, me han dicho que estás muy buena, a mi de ti también....¿nos habrán mentido?

Mucho rato hablando, nos damos el teléfono, podríamos quedar.....

Total que quedamos la noche del martes, noche de frío pero yo no dudé en ponerme uno de mis modelitos más chiquito y escotado que tenía en el armario.



Nos encontramos en el punto concretado y joderrrrrrrrrrrrrr: ¡qué guapo es el mamón! (me lo recomendaron muy bien)

Tras intercambiar unas cuantas frases decidimos meternos en un bingo, ¿cómo? Si, en un bingo.

Nada más llegar nos sentamos, nos dan un cartón a cada uno y.....cantamos Bingo....sisisiisi, con el nº 14 en el cartón no podría ser de otra manera.

2º cartón, otro bingo..los roces iban en aumento con los bingos, me estaba poniendo fatal.

Su sonrisa era de vicio, no veía el momento de quedarme con él a solas.

Pero bueno, seguimos la ruta y nos fuimos una discoteca, era pronto y no me apetecía entrar de los primeros,a sí que preferí quedarme fuera a pesar del frío y él se me acercó y me empezó a besar...primero suave luego con más pasión, se me fue el frío de golpe.

Entramos en el local y no parábamos de rozarnos y besarnos, parecía que lo íbamos a hacer allí mismo.

La camarera ya no sabía hacia donde mirar, a mi la verdad, hubo un momento en el que me daba absolutamente igual todo, deslicé mis dedos entre su ropa y le cogí la polla que estaba más dura que el hielo, pero caliente a punto de reventar.Se la acaricié, tenía ganas de agacharme y dejarme llevar.

Bailábamos, pero todo eran movimientos sexuales, ya no había nada más que pensar.

Nos fuimos a los apartamentos y entré directa al baño a lavarme, seguidamente fue él.

Yo lo esperaba solo con el vestido, habían desaparecido mis medias y mi ropa interior.
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Se acercó a mi y tras besarme fue bajando entre mis muslos,apartaba mi vestido con fuerza, lamiéndome y poniéndome a 100, pasaba su lengua por mi clitoris de una forma que me hacía jadear como una perra en celo....necesitaba sentir su polla dentro de mi.

Cambiamos de posición y empecé a lamersela por todos lados, la introduje en mi boca y noté como se estremecía de placer...

Entonces me puse encima de él, le pasé los pechos por la cara, me encantaba como los chupaba y jugaba con ellos, y lo cabalgué con ganas, él se movía genial y llegué al orgasmo en pocos segundos...un orgasmo tras otro( soy multiorgásmica)..

Ibamos cambiado de posturas, para mi la mejor a cuatro patas, entonces si me corrí como una loca,me golpeaba con su mano en el trasero y yo le pedía más,. era increíble el estado de lujuria en el que me encontraba.

¿la corrida? en mi boca por supuesto y tragada...más vicio y más placer...¿repetiremos?