Buenos días a todos, en el siguiente relato intentaré ser lo mas explícito y por el mayor respeto al lector(a) que dedique su tiempo en leerlo me esforzaré, ante mis limitaciones, a realizar un buen relato y respetar toda grámatica y ortografía en cada línea. Sin ánimo de realizar debates, de antemano pido disculpas ante cualquier falta gramatical u ortográfica.

Menuda mañana soleada me decido sentarme en una silla situada en el porche de casa empiezo a escuchar pajaritos trinar o cantar. Es fantástico ser capaz de ser parte de esta mañana tan linda que dibuja un radiante sol en un cielo despejado con un clima que de momento se esta manteniendo moderado. Todo parece perfecto, y es de agradecer porque el sol sale para todos y es donde acepto que me estoy convirtiendo en un monstruo cruel que esta matando una vida, una vida que es la mía. Un monstruo que no me deja dormir ni comer, un monstruo que me quita la tranquilidad y los sueños. Un monstruo que me perturba obsesionandome con ideas de Amor. Lucho por vencer a este monstruo porque lo único que hará es que llegue a perder a las personas que amo honestamente en mi vida, personas han tocado mi vida, personas como mi familia, amistades, personas como tú (te llames como te llames, lo escribo con delicadeza y cariño) y yo. Creo que ya he luchado o soportado a muchos inconvenientes como la falta: de comida, de hogar, una cama donde dormir, abrigo para frío. Como también de haber soportado el menosprecio de los demás, injurias, calumnias, amenezas, abandono, rechazos constantes, sueños frustrados.
Pero esto esta siendo díficil de superar o comprender, seguramente he dejado de entrenarme y me he quedándome dormido en los laureles.
No permitiré que este monstruo se haga con el control y me domine, le superaré y le venceré para siempre porque estés donde estés te extraño y por nada del mundo quiero perderte ni estropear el vínculo que se haya creado entre tú y yo, ruego que eso jamás suceda, ruego jamás de los jamás lleguemos a perder contacto ni amistad.
Seamos quienes seamos o estemos donde estemos lucharé por nuestra amistad y ningún monstruo de bajo autoestima u vana obsesión va a estropear todo lo lindo y hermoso que se ha creado entre tú y yo...
Porque tu sonrisa angelical y llena de vida, y tus palabras me mantiene vivo y al recordarlas me permiten ver un poco la luz al fondo de esta penumbra espiral de negatividad; que me oprime y aniquila por momentos a mis pensamientos; y me ayudan para seguir luchando.
Siento por ser como soy, un blando que cualquier viento de nada quiera tombarlo.
Esta claro que tienes decidido en no formar una historia entre nosotros, pero no permitiré que este monstruo nos quite lo que hemos creado...

Estés donde estés, con lo poco que queda de mi, con lo poco que queda de mi alma te deseo todo lo mejor y los mejores éxitos en todo lo que te plantees y realices, y te doy todo de mi con lo poco que queda de mi alma.


Terminado este relato, pido disculpas al lector(a) ante cualquier expresión. Perdonar si os hecho perder aquel valioso y comprensivo tiempo.

Un saludo.

Perdóneme hoy usted a mí, el atrevimiento de comentar su literatura, realmente la suya si es asombrosa. No se disculpe, lo es. Yo no soy capaz de decir tanto con tan poco.
Yo también, creo entender su sufrimiento y la incorpórea presencia del negativo “monstruo”.
¡Ojalá! Su vida también gire ciento ochenta grados y le acerque a la luz, aunque no ilumine, al menos aclare sus penumbras y que su claridad, aleje los “monstruos”.
Tampoco usted pidió opinión, lo mío solo se trata de: humilde comprensión, empatía o la epidemia del mal de muchos, que, gritando en silencio, sangramos por los ojos cuando nuestras manos no pueden hablar.
Si, yo sí, la vuelvo a ver, el pasado día del padre me consolé entre sus brazos y volví a sentir su ligero abrazo y el sublime roce de la piel de su rostro. Puede; que solo reciba la euforia de las drogas que atenúan el dolor momentáneamente para devolverme después a la más cruda destemplanza de la realidad, pero por unos minutos alivia mi solitario desconsuelo.
Es fácil repetir las palabras de aliento, tantas veces emitidas en vano. Y con la facilidad del: “me pongo en su lugar.” (Nunca nadie, puede ponerse en el nuestro) Las omito, pero sabe usted que están entre las torpes expresiones de mis pensamientos.
Perdone por no agradecer su respuesta aquel día. Pero era 28 de febrero (solo uno más en el calendario) un día peor que los malos para algunos.
Como no me he expreso bien, me he atrevido a utilizar parte de sus letras de aquel comentario.
Creo, que los dos, contamos con la esperanza de que “alguien” nos lea y si no nos entienden, al menos sepan cómo nos sentimos.
Reciba un cordial saludo de este personaje, también invisible. Y créame, creo entenderme, muy identificado. Con retraso: “De bien nacidos, ser…”

Hola estimado Carretan.

Un compañero de trabajo decía: "No somos nada, y desnudo menos".

Nada está escrito, pero hasta que llegue ese momento sea cual sea la situación, intentaré mantenerme firme aunque no tengas fuerzas.

Las drogas, las drogas, las drogas. Creo que la única droga que he probado es el Amor, si es que existe.

En realidad le temo a las drogas, creo que soy más de Wisky o beber. Pero por una extraña razón, en los últimos momentos dolorosos o tormentosos de negativadad no he vuelto acudir a la bebida. Estoy tomando nuevos hábitos (correr aunque me cueste un mundo, leer hasta cansarme, y dar largos paseos), y creo que esos hábitos han nacido porque siento que ella (se llame como se llame) no le gustaría verme en ese estado. Haberla conocido ha salvado literalmente mi vida, aunque ella no lo sepa o no lo vea...
Ella (se llame como se llame), se ha convertido en mi Ángel, y la adoro muchísimo.

Tengas un buen día estimado Carretan.

Bueno, Dannybello, me voy a permitir tutearte, ya que tu lo haces y al final voy por la vida de rockero indomable y rebelde motorista. Pero, por de-formación, casi siempre trato a todo el mundo de usted, luego ya hallaré indicios si debo pasar al tuteo. No pocas chicas se han extrañado que lo hiciese, pero no me sale directamente el tuteo.
¿También te salvaron “literalmente” la vida?
Valla al final, encima tenemos más cosas en común.

Me han preguntado muchas veces ¿Porqué? “me das tantas veces las gracias”.

No sé, si tú has leído un relato que hay por ahí debajo, de un tal; carretan y se titula: “2 ½ de pulgadas solo 6,35 cm”. Ese tiene partes de las respuestas iniciales, para terminar con otro titulado; “Así se acabó”

Saludos desde aquí.