Una nueva experiencia
De vez en cuando me viene bien reirme de mí mismo. Ahí va.
Ringggg, ringggg.
- ¿Hoola? - con voz sensual y melosa.
- Hola, ¿eres Chicasexy del foro? - con voz ronca y varonil.
- Sí, mi amor, ¿eres también del foro?
- Sí, soy Perillancito. Habrás leído algo de mí, especialmente mis experiencias, llevadas a límites de la sensualidad que van más allá de...
Cinco minutos después.
- ...aunque últimamente intento influenciarme menos por la escuela naturalista francesa, de la que opino que...
- Sí, bueno - cortando de seco -, ¿qué quieres?
- Bueno, he visto tus fotos y me gustaría que nos viésemos.
- Cuando quieras, estoy disponible por las tardes a partir de las seis.
- Bien, ¿cuánto cobras por el servicio?
- 120 euros a la hora con francés y terminación, si quieres griego son 50 más.
- De acuerdo, ¿quedamos dentro de un par de horas?
- Bien, sin problema, cariño.
- ¿Te importa si llevo a alguien más? Sólo estará mirando.
- Ummm, bueno, pero serán 50 euros más.
- Vale, entonces 170 en total por una hora. Estás por la plaza de los Cubos, ¿no?
- Sí, llámame cuando llegues y te doy la dirección exacta.
- Hasta luego y gracias.
Toc, toc, toc.
- Hola, pasad chicos.
- Hola Chicasexy.
- Hola, tú eres Perillancito, ¿no?, ¿y tú porqué estás tan serio?
- Es mi notario, el Sr Polvedilla.
- ¿Tu notario?
- Sí claro, como ya te dije quiero darles a mis experiencias una pátina de datos fiables y fidedignos.
- ¡Ah!, bueno, fidedignos, si es así - con cara de circunstancias y pensando que por la mañana el friki con el traje de Spiderman y ahora éste.
- ¿Te pago ahora?
- Sí, mejor - "aunque algo me dice que mejor que no, pero bueno, ya que está aquí".
- Toma 170 euros. Apunte Sr. Polvedilla, no entrega recibo a la entrega del dinero. Apunte también que es la chica de las fotos, aunque parece más alta en ellas.
- ¿Utilizo el impreso 470, don Perillancito?
- No, no, por favor. Hoy no haré griego.
- Bien, tomo nota pues en el 450.
- Apunte, por favor, apartamento limpio y recogido, aunque un tanto oscuro. Velas y música que dan un toque oriental...
- Perdonad que os corte, pero ¿podríamos empezar? - "y terminar, por favor".
- ¡Ah, claro!, por supuesto. Apunte también que Chicasexy se muestra ansiosa por empezar, je, je, je.
"Gilipollas".
- La ducha la tienes al fondo, pasa por favor.
- Sr. Polvedilla anote, ducha amplia y toallas secas.
"No te jode, ¿y qué esperabas guapito?".
- ¿Le importa que salga, Sr. Perillancito?, tanto vaho me hace sudar y con la americana usted comprenderá que...
- Sí, sí, por supuesto, la donna eeee mobile.
"Joder, y encima desafina".
- Bueno ya estoy listo, Sr. Polvedilla, siéntese ahí, por favor, que yo me voy tumbando en la cama. ¿Puedes empezar con el francés?
- Sí cariño - con tono resignado.
- Sí, uf, apunte Sr. Polvedilla, arg, francés, bufff, uno con trescientas uyuyuyuyyyy veinticinco milésimas.
- ¡¡¿¿MILÉSIMAS??!!
- Sí, soy un gran aficionado a la fórmula uno y ahora que Alonso esté en Ferrari he pensado que sería una manera bastante precisa de evaluar la experiencia.
- ¡¡FUERA!!, ¡fuera de mi casa!
- ¡Pero esto no son maneras de atender a un cliente, señorita! Además, ya he pagado.
- ¡Toma!, ¡toma el dinero y largo!
Portazo.
- Sr. Polvedilla, apunte que esta señorita no es todo lo profesional que debiera.
- Sinceramente, no sé yo, Sr. Perillancito, no sé yo.
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