Mi compañera Julia
Hola foreros,
Os cuento un relato, os diré que aunque tengo pareja, llevaba ya un tiempo sufriendo una atracción brutal por una compañera de trabajo llamada Julia.
Julia es una mujer, madura, 52 años, separada.
LLevamos 4 años trabajando en la misma empresa. Por motivos de una restructuración en la empresa, ahora pasamos mucho tiempo compartiendo nuestras oficinas.
Ella es alta, rubia, pecho medio pero bien puesto, culo duro para su edad, y que puede pasar sin problemas de una mujer de 44 o 45 años. Hace natación y conserva un tipo impresionante.
Desde que empezamos a pasar mas tiempo juntos en el trabajo, empezamos la tipica relación de tomar algo después del trabajo, hablar de nuestras vidas, etc.
Un día, después de habernos tomado tres o cuatro copas (ya que ella le gusta las copitas, aguanta bien el alcohol), empezamos a hablar ya desinhibidamente de cosas mas personales. En un momento dado, ella me dice:
- Bueno tú con tú pareja no tendrás problemas de follar, pero yo llevo mucho tiempo sin catar.
Seguimos hablando y le pregunte cuanto tiempo, y me dice que desde que se divorció hacía 6 meses, no echaba un polvo.
Así empezó la cosa, una tarde en el despacho, me comenta que tenía un problema con el ordenador.
Yo me puse a mirar su ordenador, era una cosa que un cable no estaba bien conectado y hacía que no se viera bien la pantalla.
Cuando estaba colocando el cable, ella se acerco por detrás de mí y entonces para mirar el cable que estaba cogiendo, echó su cuerpo sobre mi espalda, entonces fue cuando noté su pecho izquierdo en mi espalda. Reconozco que al principio me incomodó e hice un ademán de echarme para adelante para evitar su contacto. Pero enseguida me volví a echar para atras, porque deseaba su contacto con ese pecho maravilloso. Enseguida me empalmé.
Acto seguido le dije que se fijara en el cable que era, por si le pasaba otra vez. Ella se puso donde yo estaba y me pregunta si es que había algún puerto del ordenador que hiciera mala conexión.
Entonces fui yo quien por detras me acerque poniendole todo el paquete en su culo, mi miembro duro como estaba se lo coloqué entre las nalgas. Quería ver cual era su reacción, y esta fue increible, ella al notar mi polla entre sus nalgas, se echó para atrás, comprimiendomela todavía más.
La situación era compleja porque alli por el despacho había mas gente, asi que hicimos como si nada hubiera pasado. Pero todo estaba por pasar.
Unos días despúes habiamos quedado en un bar para tomar un café y ella me iba a traer unos papeles que necesitaba de unas cuestiones del trabajo.
Llegué al bar me pedí un café, a los 5 minutos ella entraba por la puerta, venía con su hija mayor, una chabala de 29 años, muy guapa. Se pidieron un cafecito y cuando acabo la hija, se fue, dejandonos a Julia y a mí.
Julia, venia con un pantalón negro que le quedaba increible, resaltando su precioso culo. LLevaba una camisa, y como no siempre lleva 2 botones desabrochados, dejando ver el sujetador. El sujetador era rojo carmesí. Empecé a desviar mis ojos hacia su fantastico canal, y empecé a sentir la erección.
Allí empezamos que si después del cafe un licorcito, que fueron 2 o 3 al final.
Cuando acabamos me dice que como venía de casa de su hija no me había traido los papeles.
Su casa pillaba cerca, asi que fuimos andando hasta allí. Nunca había estado en su casa. Subimos y pasé dentro. No había nadie (ella tiene otro hijo de 31 años, que también vive fuera por motivos de estudios).
Me enseña la casa, la cocina,me dice lo bien que cocina y me habla de cosas de cocinar que reconozco me daban igual, yo no paraba de intentar mirarle por su generoso escote.
Ella sigue enseñandome la casa, y ya me dice:
- Bueno vente a la habitación que allí tengo los informes.
Voy con ella, y su habitación era grande con una cama grande, y veo que por alli en un cestito tenía ropa interior para lavar. Había un sujetador negro y había tangas y bragas.
Entonces en un momento, me pregunta:
- ¿Te gusta mi casa?, yo le contesto que esta muy bien.
Y me dice, - ¿Y te gusto yo?.
Me quedo mirandola, y en unos segundos de silencio, sin decirnos nada, ella me había cogido por la cintura.
Y le digo, - Yo creo que sabes perfectamente que me encantas.
entonces Julia dice: - Hasta las 9 de la noche no vendrá mi hijo por casa.
Y añade: - quiero eso que me pusiste el otro día en el culo mientras estabamos en mi ordenador.
A partir de ahí, ya no pude parar, empezamos a besarnos locamente. Sin cortarme ni un pelo la agarre por el culo, sobandoselo sin parar. La quite la camisa, y el sujetador, y Dios que delicia,sus tetas medias, ligeramente caidas, con unos pezones marroncitos deliciosos,que enseguida empecé a chupar.
Ella no se quedó atrás, me bajo los pantalones y el slip, mi polla salió dispuesta a agujerear a esa hembra.
Ella se agachó y empezó a metersela toda en la boca, madre mía, chupaba con unas ganas,mientras decia que el tiempo que no se comía un buen rabo.
Estuvo 10 minutos comiendome la polla, yo estaba a punto de estallar, asi que le dije que parara, la eche en la cama, le saque las bragas y empecé a comerle su rico coño. El coño era sabroso y arregladito con algo de pelito, estuve comiendoselo hasta que ella misma me indico para ponernos en un rico 69. Como disfrutaba la guarra, mientras le daba de lametones al principio solo en el coño pero después no me corte y le empecé a chupar su culo. Y me di cuenta de que ese culo había sido taladrado muchas veces.
Ella se corrió mientras se lo comia y como yo quería metersela, la puse a cuatro patas e ipso facto le metí toda esa polla en su rico y gran coño, mientras la daba arreones, empece a pasar un dedito por su humedo culo ensalibado. Le meto un poco un dedito en el culo y veo que le gusta. Y le digo: - Julia, ¿quieres que te folle el culo?
Ella me dice: - Me encantan que me follen mi culo.
Dicho esto, le empiezo otra vez a ensalibar su culo, le meto bien la lengua y después el dedo indice, ella disfrutaba como una perra, finalmente le pongo la polla en su agujero trasero, empujo y veo que entra bien, asi que con mi polla como el acero, la empiezo a dar lo suyo, 3 minutos después le descargo toda la leche dentro de su culo. Se la saqué rezumando y va ella, me la coge, se la mete en la boca y me la deja limpia.
El polvo fue brutal, increible.
A partir de ahí, bien en su casa o en hotel, de forma discreta (ya que yo tengo pareja) y esporadicamente, tenemos unos polvos impresionante.
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