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A Rey muerto, Rey puesto. Bienvenida Patricia

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Bueno, por fin creo que podemos sacar conclusiones sobre esta chica, (de la que pongo el enlace de su anuncio para ubicarnos), todo ello, después de una tarde llena de sorpresas.

Tal y como habiamos quedado, en la mañana de ayer, concretamos la cita para la tarde, tanto la hora, como el lugar del encuentro. Para poneros en antecedentes, contacte con ella por el messenger, y despues de preguntarnos mutuamente algunas cosas (y hacer un poco el gilipollas por mi parte), quedamos en que sería ella la que me reconociese a mi en el lugar de encuentro. Ella no me había enseñado la cara en ningún momento, ni dado el numero del movil para poder contactar con ella, ello, unido al infructuoso intento por parte de otro amigo y que en el hilo general de Ciudad Real relate, todo hacía presagiar que me volvería con el mismo dinero en el bolsillo y un palmo de narices. Pero como he dicho, la tarde me depararía unas cuantas sorpresas.

¿Por qué continué con esta aventura? Bueno, después de conocer el intento de mi amigo, los detalles, y algunos aspectos de la conversación con ella, había cosas que me hacían pensar que a lo mejor no era un tiempo tirado a la basura. Además, pensé que mi riesgo era minimo con respecto a que alguien me reconociese.

A la hora convenida, y en el sitio convenido (advierto que es un sitio publico y concurrido) me persone dispuesto a esperar media hora y largarme. Al cabo de varios minutos, la primera sorpresa estaba a punto de caer. Ante mi, se personaba una chica rubia, que por supuesto no correspondía con las fotos de Patricia y que se dirigía a mi por mi nombre. Dos cosas se me pasarón por la cabeza, primera ¿Quién coño es esta tía y por que me conoce? y segundo "Si esta es Patricia, con lo buena que está, me da igual que no sea la de las fotos". Lo primero que hice fue mostrar prudencia, y respondí con un "SI" y un "No te conozco, ¿Quién eres?". La chica, como digo, para romperse de buena, me respondió que era amiga de Patricia, que cogiese el coche y volviese por allí que ella estaría esperando para irnos al piso. Como es lógico, y una vez que todavía trataba de salir de mi asombro
primero, y segundo rogando a Dios que Patricia estuviese tan buena como esta, fui a por el coche cumpliendo con lo ordenado.

La segunda sorpresa de la tarde, es que cuando volvia con el coche, en el sitio indicado, se encontraban esta vez dos chicas, la rubia anteriormente mencionada a la que a partir de ahora vamos a llamar Ana, y otra chica más que fisicamente se correspondía con las fotos publicadas de Patricia. Intentando controlar el volante (porque ante el salto de mi polla al verla, le dio al volante y me hizo perder el control), aparque justo a su lado, subiendo ellas al interior del coche, Patricia delante a mi lado, y Ana detrás.

La tercera sorpresa es su voz, es dulce, melódica, con una sonrisa de pilla que te hace pensar "te voy a comer entera". Llevaba puesto una minifalda oscura, con botas altas, y una camiseta ceñidita oscura, que hacía intuir sus encantos. Para rematar, una cazadora de cuero ceñida. Pelo largo, lacio, nariz respingoncilla, y como ya he dicho una sonrisa
cautivadora.

Dos besos de rigor y un sonrojo por parte de ambos, y me dieron las indicaciones de hacia donde debíamos dirigirnos. En el camino, fuimos conversando basicamente de la sorpresa que me había llevado al presentarse primero su amiga. La explicación, la verdad, es que resulta tan sencilla como abrumadora. De esa manera, evita tios que se escondan para verla primero a ella, ver tranquilamente que el tio parece de fiar, evita fotos falsas y que el tio entre dentro de su canon de belleza, para ello, utiliza a Ana, una amiga de confianza. Así, por lo tanto, evita malos rollos, o tios que luego por la calle o en la discoteca la llamen puta o le ofrezcan dinero porque se han enteredado. También consigue, que no solo ella le vea la cara al tio, sino otra persona más, de esa manera, si le pasa algo, siempre hay un testigo, en lugar de no saberlo nadie. Aquí hago un inciso en mi relato, de todos los que hemos leido el anuncio es sabido, que ella hace incapié en que deben ser chicos guapos, e incluso, en las conversaciones que hemos mantenido por el messenger, me hizo enviarle una foto para comprobarlo.

Bueno, así transcurrió el trayecto hasta el piso, se trata de un piso deshabitado, pero amueblado, de sus padres, al que parece ser que no van más que en verano. Aparcamos, y quedamos que primero ellas subián al piso, para después, con unos minutos de diferencia, hacer yo lo mismo. La verdad, es que pensé que ahí se terminaba mi suerte, mientrás subía
y después de cruzarme con una vecina (muy simpática la viejecilla), dos cosas me rondaban por la mente. Primero, si efectivamente estarían en el piso indicado, y segundo, sino habría alguien más dispuesto a partirme la puta cara. Pero como bien he dicho al principio, la tarde me deparaba muchas sorpresas, y es que después de llamar con los nudillos, detrás de la puerta aparecieron ellas, y solo ellas.

El piso está bastante bien, de reciente construcción, como dije, está amueblado completamente, pasamos al salón, y después de preguntarme amablemente que quería, me sirvieron una Coca Cola (perdón, se puede hacer publicidad, o esto es como en la tele?) mientras ellas se preparaban un ponche y un vodka. Yo, había llevado una botella de Cava, pero en ese momento no lo vieron conveniente.

Así pues, la quinta sorpresa se presentó ante mis ojos (no penseis mal), mientras Ana se liaba un porro, Patricia se mostró como una chica muy simpática, conversando amablemente, respondiendo a muchas preguntas que tenía pendientes. He de decir, que no nos encontramos señores con una Lumi cualquiera, es más, no podemos considerarla realmente una Lumi, y no quiere que se le trate como tal. Patricia, es una chica que como a todos, le apetece tener dinero para sus cosas, ropa copas, chocolate, móvil, etc... todo aquello que una chica de 19 años puede necesitar o querer. Para ello, pues ha decidido
quedar con tios a cambio de dinero, con la condición que estos le gusten y pasarselo bien. De hecho, la cazadora de cuero que llevaba, se la ha comprado con el dinero que le dio el tio con el que estuvo el pasado martes. Y así transcurría la cosa, charlando con Ana (también muy simpática), entre alcohol, porros y charla agradable, tengo que reconocer, que hasta ese momento, pensaba que la suerte iba a estar otra vez de mi lado y que tal vez la sopresa mayuscula sería tenerlas a las dos para mi, pero me fue esquiva, y mientras Patricia, de manera natural, se sentaba encima mio levantándose la minifalda (eso me permitió palpar bien su culete) y empezaba a morrearme, Ana se acercó a nosotros, nos dio dos besos a cada uno y le comentó algo a Patricia al oido que no llegue a oir, se despidió y nos dejo a Patricia y a mi con nuestros morreos.

La frescura y la naturalidad con lo que hace todo esta chica es sorprendente, la forma de besar, de restregarse y de mover su cuerpo. Nos fuimos desnudando por partes en el salón, en el pasillo y así hasta un dormitorio con cama de matrimonio. Al ir desnudandola, fui descubriendo lentamente cada parte de su cuerpo, cubiertos por un sujetador negro y un tanguita de tirilla.

¿Como es desnuda?, pues como una chica con 19 años, unos pechos duritos, ni grandes, ni pequeños, esa medida justa que la hace más juvenil, es delgada, dura y tersa en cada parte de su cuerpo, con un culito ideal, sin ápice de grasa ni celulitis por ningún lado. Estatura media para una chica. Tiene un piercing en el ombligo y tres tatuajes.

¿Que pasó a partir de ahí? Bueno, entre que yo no soy de gustos muy raros, entiendanme señores, no me gusta el griego y otro tipo de cosas más raras, pues deje todo a la naturalidad de la chica. Primero, y sin mediar palabra, se arrodilló ante mi y empezó con un francés natural divino, antes de fastidiar el momento (jejejeje), la tumbé en la cama y le correspondí en ese conito depilado y tan suave que me ofrecía, para pasar a un 69 durante el que se corrió. Después, posturas varias con las que poder acariciar y besar su cuerpo. Aquí hay que hacer un inciso, y es que mientras cabalgaba encima mio, sono su teléfono móvil y ella respondió. La verdad es que le perdono completamente, teniendo en cuenta que era su amiga Ana, para preguntarle como iba todo (supongo que para asegurse que no había sacado una navaja y la estaba violando), a lo que ella respondió con un "muy bien" que me halagó. Una vez colgado, seguimos por nuestro derroteros, terminando dentro de ella cuando estando encima mio, se puso a moverse puesta de cuclillas (brutaaaaaaaaaaaal), después, siguió así un rato más hasta correrse de nuevo ella.

¿Y después? Pues charlita muy amigable, unas copas de cava, caricias y besos por doquier, me estuvo enseñando unas fotos del móvil que me ha prometido enviarmelas, etc... Descubriendo en resumen a una chica encantadora. Momento para recordar, pues verla
bailando en la cocina, contoneandose, desnuda, mientras se preparaba otra copa de cava.

Como ya se acercaba la hora de irme, le pregunte si le importaba que me diese una ducha, a lo que ella accedio sin problemas, la última sorpresa de la tarde, fue verla entrar y sin mediar palabra meterse conmigo, enjabonarnos mutuamente y empezar a mamarmela de nuevo, para finalizar una tarde muy agradable corriendome en su boca.

Le ayude a recoger todo y baje yo primero, luego ella y la acerque al centro, esta vez fue ella la que llamó a Ana para decirle que "todo muy bien y que iba para casa". Durante este trayecto alguna sorpresa más que me dijo y que esta vez me reservo. Dos morreos y a casa.

Reflexiones: ¿Repetirás? Claro, ya he quedado con ella para el 12 ó 13 de febrero.
Recomendable: Al 100%.
Tiempo y Tarifa: Entre unas cosas y otras se me fueron 2 horas y media. El precio negociable con ella.

Punto y final. Perdón por el ladrillo.

Saludos.

Decker