Foro Spalumi de información y opiniones sobre acompañantes

NOMBRE: Shaira
PRECIO: 100€ hora
MEDIDAS APROXIMADAS: 1.70-1.75m y unos 20cm
WEB o ANUNCIO:
FECHA EXPERIENCIA: abril 2012
TELEFONO:
DIRECCION: Serrano 7
DATOS DESTACABLES: Venezolana, veintipocos años, besa un poco reacia, francés con, versátil, cuerpo bueno y curvilineo, pechos medianos bien puestos, erección muy buena, higiene muy buena, implicación buena, actitud amable y satisfactoria, chica recién llegada a España, esta muy buena y tiene una cara muy particular (muy guapa), una belleza "exótica" para estos lugares, un fallo que tiene son las cicatrices de la operación de pechos pero tampoco molesta, activa y pasiva sin problema. Agencia.
VALORACION FISICO (DE 1 A 5): 4.5
VALORACION EXPERIENCIA (1 A 5): 4.5

Aprovechando el puente de mayo mi calentura me llevo por segunda ocasión a la casa de Serrano 7 a altas horas de la madrugada. Mi intención era repetir agencia pero cambiar de chica y emular la experiencia que anteriormente me dejó un buen sabor de boca en dicho local. Mismo protocolo, tocar el timbre en el portal y subir. Me abre la puerta el mismo chico y me reconoce, a penas hace 2 días he estado ahí por primera vez. "¡Usted ha causado estragos por aquí!" me comenta mientras se ríe y me escolta a la habitación, me muestra entonces el nuevo catálogo de chicas, que para mi sorpresa e completamente distinto al de la vez anterior, al menos el 80% de las fotos que me muestra son chicas distintas, lo cual me dificulta la elección porque hay entre ellas varias novedades que se ven apetecibles. Le pregunto por la personalidad de las chicas, ya que hay pocas brasileñas (suelo llevarme muy bien con ellas) y no puedo decidirme, de nuevo el código putero le impide hacer recomendación pero me insinúa de una que esta recién llegada, morena suculenta de mirada perversa. Pues venga, se paga la pasta y a esperar.

Ya en pelotas recostado como rey en la cama espero un par de minutos a la chica, previamente me he lavado en el bidé y he dejado mi ropa en el sillón frente a la cama. No pasa mucho tiempo cuando se abre la puerta y entra una tía de muy buena pinta, morena piel tostada ataviada en lenceria negra muy mona y tacones altos que me ponen muy caliente. Me saluda sonriente e intercambiamos sólo un par de palabras, tonterías. Sigo recostado en el centro de la cama con la espalda en la cabecera y los brazos extendidos, ella se coloca al pie del colchón frente a mi y se va desprendiendo el sujetador sin dejar de mirarme con aire de travesura adulta. Deja ver sus tetas, bien puestas, de buen tamaño de las cuales sólo destaca el detalle que he comentado en la descripción. Extiende su mano hacia adelante y deja en la cama el sujetador, se contonea para quitarse las bragas y deja al aire una polla depilada muy apetecible, se descalza y se dirige a la ducha de la habitación. Abre el paso del agua y se mete a la ducha, me hace un gesto para que la siga y obedezco, aunque no soy partidario de los juegos previos como este me dejo llevar. En a ducha mojamos nuestros cuerpos y tenemos nuestros primeros roces, sus tetas duras y firmes desde su espalda se sienten bien y su culo de la misma manera conoce el tacto de mi polla que comienza a endurecerse por tener ese buen par de nalgas pegado a ella. No pasamos mucho rato en la ducha (afortunadamente, porque creo que es perder un poco el tiempo para follar) pues el jabón se ha quedado fuera, salgo yo primero y traigo de regreso una toalla para secarle, yo ya lo he hecho, así me tumbo nuevamente sobre la cama y espero a que esta nena me acompañe.

Para mi gusto la muy maja se coloca de nuevo los zapatos, cosa que me pone a tope para follar, se desliza en la cama y con esa carita me pregunta sobre lo que haremos. Lo mío no es ciencia espacial, me gustan las cosas simples y lo que quiero es que me la coma como se debe. Después de un leve jugueteo e intento de besos (no hace una cobra, pero se nota que tiene un poco de desconfianza en ese sentido) saca un condón para hacerme un francés. El francés sin se disfruta infinitamente más, pero no pasa nada si lo hace así, cada chica con sus métodos. Comienza a comerme la polla con unos labios carnosos que se sienten incluso a través del condón, la come muy bien, y yo gozando de lo lindo. Su polla no tarda ni un segundo en estar más dura que una barra de acero y su tamaño esta muy bien, normal y de grosor promedio con una leve curva hacia arriba. Mientras la come me mira y juega con su lengua y manos, mis huevos también reciben parte del tratamiento, lo estoy pasando pipa. De un momento a otro paso a comerle la polla yo, ella me mira desde arriba y me pide me suelte el cabello mientras me lo toca, se ve que lo pasa bien con lo que hace. Momentos después estamos haciendo un 69 delicioso, se nota que le gusta ser activa y que se la coman, le hago unas mamadas con todo lo que puedo y noto que le gusta, siento su mano en mi nuca y goza cuando me la trago toda. Aquí llega el momento en el que tanto cachondeo y sexo se vuelven difusos y sin tener un registro exacto de los hechos de pronto me encuentro de espaldas enculado y ella haciéndome un beso negro delicioso. No sé como llegué a eso pero lo siguiente es que está la tía metiéndome la polla y yo a 4 patas. No hubo ningún dolor y todo fue hecho con maestría enculadora. La tía le mete caña y el vigor de las embestidas no se hace esperar, yo estoy en el cielo mientras ella bombea con fuerza para darme algunas estocadas que me hacen gemir de dolor/placer, su polla no es enorme pero cumple con su función de maravilla.
Como yo iba originalmente a meterla, y no a que me la metieran, es relativamente poco el tiempo que me encula, la verdad es que no aguanto mucho en ello. Saco su polla y le comento que sigamos con unas buenas mamadas (nuevamente con). Antes me lavo de nuevo en el bidé para evitar cualquier accidente. Seguimos entonces nuevamente con unas buenas comidas de polla y poco a poco va dejando que me acerque más a su boca, no besa del todo, pero un poco más que un pico sí ofrece. De nuevo le damos caña al 69 y otra vez me encuentro sin hacer buena memoria con ella boca arriba y yo con la polla al natural rozando su culo y pajeándola, nos miramos mientras hago esto y sus ojos me ponen cada vez más, mientras hago esto siento una necesidad de clavarle toda mi carne así como está, pero de eso nada, la seguridad primero. Se levanta por un condón y me lo coloca, todavía recuerdo sus uñas tocando mis huevos mientras lo hace, una delicia al tacto. Un poco de lubricante y se coloca, es mi turno de taladrar.
Describir el folleteo sería un poco aburrido, pues no hago cosas extraordinarias, pero debo decir que es un placer que se goza muy bien con esta chica. La tía aguanta el bombeo fuerte y profundo sin ninguna queja, se folla en distintas posiciones y se mantiene erecta todo el tiempo. La pajeo mientras le follo y decimos guarradas de todo tipo, recuerdo que me ha dicho que quiere que me corra en sus tetas o en su cara, lo cual me hace follarla y pajearla con más intensidad. Admito que mientras le follé mantuve un ojo en el reloj de la pared, no quería que el tiempo se me fuese volando y tener que apresurar la corrida, pero no fue el caso. Follamos un largo tiempo así hasta que quise correrme, para ello me desprendí la goma y me pajeé a placer mientras ella hacia lo mismo tumbada boca arriba con la cara en alto y tocándose las tetas. Le pedí que me la chupase un poco sin, no quería irme a casa sin sentir esa boca al natural, así lo hace y con ello logro terminar la faena sobre su abdomen y un poco en sus tetas. Una experiencia deliciosa.
A pesar de que pasamos un largo rato follando no me encuentro tan cansado ni tan sudado como en otras ocasiones con otras chicas, pero el éxtasis sin duda ha sido del nivel.

Lo que sigue es canción ya escuchada, tumbarnos un poco y hablar de Madrid, de su vida y la mía. Es una chica muy maja, con actitud muy amable y complaciente, según me ha dicho es la primera vez que está en España y no lleva ni un mes en la ciudad. Hablamos de la noche, las juergas y demás, todo sin problemas de prisas ni malas caras. En algún momento mientras hablamos suena el teléfono de la habitación, señal de que se ha terminado el tiempo, miro al reloj y es cierto, ha pasado una hora exacta desde que ella entró. Me visto mientras seguimos charlando, ella hace lo mismo poco a poco y me pide le ate el sujetador y el top que llevaba puestos. Nos despedimos de buena manera y me piro de ahí satisfecho, temo que las buenas experiencias con la agencia hagan mella en mi bolsillo. A la salida el chico bromea un poco y se despide de mi con un apretón de manos y una sonrisa, la verdad es que bastante majos y muy buen trato.

Lo bueno: La tía está muy bien, tiene una cara muy linda y morbosa, juguetona, complaciente y limpia.
Lo malo: El francés con (siempre es preferible sin, pero bueno) y que no se corriera pero es comprensible.
Para repetir: Sí