Estuve con ella la semana pasada.
Recibe por Van Dyck, piso viejo y con mucho transito de gente. Es muy profesional, no se deja tocar demasiado, da piquitos y poco mas, implicación por obligación.
El francés es bueno, lo hace sin y hasta el final en la tarifa de media hora (50€).
Nada destacable, no está mal, no es tirar la pasta, pero tampoco es nada del otro mundo.
Saludos
|