Sheyla, jovencita 25€ 603121215
 

Buenas noches. No soy de mucho escribir porque no soy de mucho catar (ni con c de coño ni con k de petroleo) y después de la experiencia de esta noche... baste decir que estoy mirando en este instante en google maps ubicaciones de conventos cartujos de norma estricta y cilicios de piel de cordero...

Comencemos.

Por teléfono todo va bien y suena bonito (como con las compañías de telefonía móvil cuando te lanzan la oferta desde el departamento de portabilidad), será por eso de prometer hasta meter... la mano en el bolsillo del incauto? En fin, que me voy (sería la primera vez que me fuera esta noche por otra parte) Voz agradable, calladita pero educada, pero bien, de verdad, te invita a conocerla y como la oferta inicial es tan económica... qué puedo perder??

Pues mi tiempo, mis estribos y mis nervios...

Llego. Más de media noche. Calle Zapatería junto a la escalera mecánica (¡coño, mecánica, como ella, ahora que lo pienso... sería una premonición?),

Me situó frente a un bajo frente a un kebab. Rellamada y adentro. La lonja reconvertida en piso no está mal, bien acondicionada pero poco cuidados los detalles (el tendedero interior lleno de ropa en el hall...) La habitación no tenía vista más que a su cuerpo y por ahí tampoco hay ningún pero. La chica que me abre en pijama ¿whatttt??? Yes Pijama... no es la de la foto pero no desmerece. La chica tiene 18 años de verdad así que... todo precioso.

La cara hubiera preferido que apareciese con el difuminado blanco de la foto... rasgos indígenas muy acuciados y dientes bonitos pero muchos, demasiados, me explico, necesitaría 5 menos para poder cerrar los labios.

Y hasta ahí lo bueno.

Entramos. Le digo que pago la oferta que se ha convertido en 30 en vez de 25 por arte de magia y que si estoy a gusto no tengo problemas en multiplicar los 20 minutos por 2 o por 3... La chica ha cogido el dinero sonriente y ha salido 5 minutos fuera y al entrar... por dios... ¿quién ha entrado???

Era su mismo cuerpo, su misma cara llena de dientes pero estaba poseida por... una ameba ralentizada... No me ha vuelto a hablar. Ni una palabra, ni una sonrisa. No a todo. nada de nada. Apaga la luz. Se tira en la cama, haz tú, me haces cosquillas, así no, ...

A los diez minutos me he ido... ¿Se habrá enterado que salía?

Por favor...

Solo recomendable para necrófilos incipientes...

Si queréis más información, podéis encontrarme en La Cartuja de Miraflores que es el convento más cercano que he encontrado.