New// filipina foto casera

First time!! Hello, primera vez, Filipina guapa perticular guapa cariños mimosa, realizó todo servicio. Chicos educados limpio, . Edad 38 años


Nombre de guerra de la lumi: Camelia.
Nacionalidad: Ella sostiene que es filipina.
Forma de Contacto: 640051491.
Fecha aproximada: La semana pasada.
Lugar: En el lumipiso de la Avda. de Marín, frente a la estación de tren.
Instalaciones: Aceptables para lo que se pretende.
Higiene: Ninguna, aunque es cierto que me ofreció ducha, que no acepté porque yo iba duchado, pero le valió mi palabra y después no usó ni las típicas toallitas.
Precio: 50 euros por 30 minutos.
Edad: Declara 38 y puede que los tenga, si los supera no creo que sea por mucho.
Cara: Dado cómo fue la experiencia...carísima.
No es fea pero en ningún caso recuerda a la encantadora cara de la oriental que pone en la foto de su anuncio y que me impulsó a coger el teléfono para llamarla… Tranquilos! … No soy tan ingenuo, llevo varios años en este mundillo y ya sé que las orientales casi nunca usan fotos verdaderas, pero, una vez que la llamé, la voz que escuché podía encajar con una chica de aspecto similar a la de la foto.
Pelo: Negro, largo.
Cuerpo: Cuerpazo, es una mujer contundente, alta, ancha de caderas, pero bien proporcionada. No encaja en el prototipo de mujer oriental pequeñita.
Pecho: Grande, no se lo trabajé mucho porque no me llaman la atención cuando son tan grandes que no caben en mi mano, tengo la impresión de que pueden no ser naturales, pero no puedo asegurarlo.
Culo: Grande y proporcionado con su cuerpo.
Piercings y tattos: No me fijé.
Defectos corporales: Ninguno. Pero visto en conjunto, no es del tipo de mujer que a mí me ponga. Puede ser buena opción para los que os gusten las mujeres exuberantes.
Actitud: Educada, pero no hubo sintonía entre nosotros y se limitó a seguir el guión sin poner nada de su parte, en plan “muñeca hinchable”.
Conversación: Normal e intrascendente, se le entiende bien para ser filipina, dice que lleva varios años en España.
Besos: Dos, en las mejillas al despedirme.
Fuma: No aprecié nada.
Francés: Me lo hizo con, pero yo, vista la deriva que llevaba el tema, no me opuse, porque, ya sólo me interesaba acabar lo antes posible y correr los menores riesgos. Aceptable, no usa mucha mano, pero no GP.
Forniqueo: No lo puedo valorar, ya que tomé la iniciativa para acabar pronto, porque no me interesaba seguir allí, dada la falta de implicación por su parte para dejarme disfrutar de las partes de su cuerpo que más me interesaban: No besos en la boca, nada de bajar al pilón, nada de caricias, ni preliminares.
Griego: Ni me interesa. Ni se planteó.
Lo mejor: Su voz, muy dulce y su educación.
Lo peor: Todo lo demás.
¿Repetir? Ni de coña.
¿Recomendable? Que a mí no me fuera bien, no significa que no le pueda ir bien a otros. De hecho yo creo que es una buena opción para los que les gusten las mujeres completas con todo grande y proporcionado, a mí me gustan más menuditas. Lamento no poder informar de cómo sería su funcionamiento en una relación completa, porque no le di opción a que me lo mostrara, … y en el caso de habérsela dado, dudo mucho de que ella me hubiera demostrado sus posibilidades porque la vi en todo momento en plan “… vamos a cumplir el requisito, y a ver si se acaba esto pronto.”
Valoración global de la experiencia: Nefasta.

Relato: Haciendo una revisión rutinaria por las páginas de las provincias gallegas de Pas y on punto com, me topo con el anuncio de una filipina, una de las pocas nacionalidades orientales de las que, hasta ahora, no había tenido relación con una de sus mujeres (por lo menos oficialmente, igual las tailandesas o japonesas con las que he estado, tampoco eran de los países que decían y tengo más lagunas en mi historial).
Así que la llamo y me quedo enganchado de la dulce voz que escucho, me monto la película en mi cabeza (“esa dulce voz tiene que ser de un cuerpo bonito, del tipo de los que me gustan a mi”), quedo con ella y allá que voy, después de hacer la correspondiente investigación por las páginas de spalumi, sin encontrar ningún dato sobre ella. “Hoy toca hacer I+D”, me dije, y allá me fui.
Después de la típica llamada desde el portal me dice el piso y me abre. Subo, me recibe detrás de la puerta y cuando entro ya veo que las cosas empiezan a no encajar con la película que me había montado en la cabeza, ya que no era el tipo de mujer que a mí me gusta, pero me digo “adelante, a ver que juego dan las filipinas”.
Pasmos a la habitación, arreglamos el tema monetario (Tenía previsto estar una hora, pero, prudentemente, decidí contratar sólo media hora, por si las cosas no funcionaban), me ofrece ducha y le digo que vengo duchado, y se lo cree, me indica donde dejar la ropa, me desvisto, paso a la cama y ¡Oh sorpresa!, no hace ni siquiera la típica limpieza con toallitas.
Intento iniciar unos preliminares pero ella ya empieza a abrir el preservativo, le digo que espere un poco, parece que le rompo un poco su guión, pero acepta, me ofrece sus pechos para que se los sobe, yo intento empezar con caricias y besos, pero, nada de nada. Comienzo a tener el síndrome de “la muñeca hinchable”, así que, después de sobarle un poco el pecho con el mismo erotismo que si magreara el pomo de una puerta, la dejo que tome la iniciativa, con lo que me coloca el condón y me hace un francés normalillo, emitiendo ella unos gemiditos de vez en cuando como si estuviera disfrutando, pero que ya emitía prácticamente desde que estaba sacando el condón de la funda, (igual era de una marca que los lubrican con sustancias afrodisíacas, porque otra explicación para tanto gemidito no la encuentro). Después de unos minutos de trabajo de ella que me ponen a tono, pretendo pasar de nuevo a preliminares con su boca y cuello, pero el mismo resultado, “si quieres teta, toma teta, pero nada más”. Empiezo a bajar al pilón y me dice que no, que no le gusta.

Confirmado de que ya había tirado los 50 euros a la papelera, le digo que vuelva al francés, porque su actitud me había decepcionado a mí, y a mi fiel compañero, que se había venido abajo.

Cuando lo pone de nuevo a tono, le digo que se acueste, le doy hasta correrme, limpieza con toallitas, conversación insulsa mientras me visto, me acompaña a la puerta, dos besos de despedida y, si te he visto, no me acuerdo, por ambas partes.


Fotos:


[Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]

__________________