Hola. Me gustaría saber experiencias con esta chica

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Nombre de guerra: Aniña
Nacionalidad: Brasileña-portuguesa
Forma de Contacto: llamada
Teléfono: 657249535
Susodicha: [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]
Fecha aproximada:Hace unos días.
Lugar: Porriño. Avenida de Galicia
Instalaciones:Es su habitación. Comparte piso con otra
Higiene: Ella limpia y aseada, y la habitación y el baño, aunque pequeños, impecables
Precio:40 (20 min), 50 (30 min) y 100 (60 min)
Edad: Yo diría que unos 35
Cara: normal, ni fea ni guapa
Pelo: pelirrojo oscuro teñido, aunque según ella en realidad también es pelirroja pero en un tono más claro
Cuerpo: El confinamiento hizo estragos según ella. Unos 10 kilos más que en las fotos. No es un bocoy pero está algo pasada de peso, algo más que simplemente rellenita. Altura de unos 165 cm.
Pecho: Naturales, grandes sin ser enormes y sin caer mucho, En consonancia con su cuerpo.
Culo: Bien. Más grande que en las fotos. Generoso sin ser excesivo
Piercings y tattos: No le vi
Defectos corporales: No me esperaba una sílfide pero algo pasada de peso para mi gusto
Actitud: Lo mejor, y luego lo explico
Conversación: Habla y deja hablar
Besos: Si pero con el covid tampoco es que yo los busque
Fuma: No olía pero no sé
Francés: natural hasta el final si quieres.
Forniqueo: Bien. Pero ella encima le cuesta.
Griego: No
Lo mejor: su actitud
Lo peor: No es el prototipo de mujer que busco
¿Repetir? en principio no
¿Recomendable? Sí, para quien le guste las algo pasadas de peso
Valoración global de la experiencia: 8

Relato: Llamo, quedo a una hora, me dice el número del piso y bla bla bla. Cuando la veo, de primeras no me gusta, buscaba alguna chica rellenita como la de las fotos pero estaba algo mas que rellena. Pero como me gustó su actitud me quedé. Si la chica es amable y está limpia y si las fotos no son falsas siempre me quedo. Me dice que me acomode, me pregunta si quiero tomar algo y me ofrece ducha. Y vamos al acto, como estaba con ganas ya que hacía tiempo que no estaba con ninguna y sabía que iba a aguantar poco le dije de estar una hora. El francés fue hasta el final, me corrí dentro de su boca. No lo tragó, eso si (que tampoco es algo que me agrade). El problema vino después, ya que, pasado un tiempo, no era capaz de volver a ponerme a tono, ya que la chica no me ponía mucho. Pero su profesionalidad fue de 10 y lo intentó hasta que consiguió sacarme lo que me quedaba de leche.