Sin llegar a haber estado con élla, he tomado la decisión sencilla de descartarla como a otras muchas, mandándola al archivo del olvido.
Motivo: Su nada delicado comportamiento.
La llamo para pedir alguna información a fin de concretar una cita, pero por teléfono me habla como sin ganas y con sonido seco. Le pido detalles de cómo pueden ser sus besos y cómo me gustan, pero no me deja terminar y ... zas ...
me cuelga la llamada.
Nada de delicadeza, cortesía o conducta adecuada. Al menos tengo que agradecerle que me haya colgado sin darme explicaciones. Otras en cambio lo pintan muy bien y, luego, nada de nada.
Le quedo agradecido, pero también la he olvidado. Sic.
|