Foro Spalumi de información y opiniones sobre acompañantes

Buenas noches, foro. Os dejo mi primer I+D como decís por aquí.

Nombre:Carolina

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País:Colombia (probablemente).

Edad:rondando los 40 (por arriba o por abajo, no sabría precisar).

Teléfono:685846420

Zona: Fuenlabrada central, muy cerca del Cash Converters. No me acuerdo del nombre de la calle, disculpad.

Fecha: esta semana.

Tarifa: 50 la hora.

Mamada: penosa, de las 3 peores que me han hecho.

Forniqueo: prácticamente no pude follarla (explico más adelante), pero fue muy placentero lo poco que se dio.

Implicación: lamentable.

¿Relojera?: sí, me atrevo a llamarla estafadora.

Físico: 7,5. Dentro de maduras. Sus tetas me decepcionaron al tacto (muy blandas).

Higiene: perfecta.

Lo mejor: su físico. Es una mujer madura, todavía guapa, con un cuerpo exuberante que incita a follarla despiadadamente.

Lo peor: todo lo demás. Lo único que tiene de profesional del sexo es que recibe dinero.

En mi búsqueda incansable de chollos (50 la hora) me topé con su anuncio. Me cautivaron sus fotos donde se adivinaba una mujer guapa de generosísimo busto. A la que pude escapé a Fuenlabrada.

Carolina recibe en un bajo "independiente" en un recoveco de la calle. Da a otra calle principal pero creo que es bastante discreto, a pesar de que en las cercanías hay locutorios y demás. Únicamente, es un canteo para los vecinos, pero tuve suerte y no había nadie en los balcones ni cercanías.

Tras la ducha y el pago, pasamos a la "acción". De entrada, rehúye los besos. Por preliminares esta mujer entiende pajearte para que te vayas corriendo si es posible. El francés, como ya he comentado, lamentable. 0 vicio, 0 técnica, 0 morbo. No tiene ni puta idea de cómo comer una polla apropiadamente. Se limpia constantemente con una toalla, a pesar de que la saliva brillaba por su ausencia. También se limpia después de que la beses. Para completar el cuadro, salió a atender una llamada personal aunque si bien es cierto, se disculpó reiteradamente.

A pesar de lo poco halagüeno del panorama, pude comprobar lo cachonda que estaba al palpar su coño, que estaba muy mojadito. Me pide que la folle muy suave, a cuatro patas. Estuvimos unos minutos, tremendamente placenteros para mí, hasta que las obvias muestras de dolor por su parte me hicieron desistir por piedad.

A todo esto, no habrían pasado ni 15 minutos y ya me decía "¿pero tú cuándo te vas a correr? Te tienes que ir corriendo". Le sugerí que buscara una postura que le fuera bien, y poniéndose ella encima y de espaldas estábamos bien los dos, incluso llegó a follarse con cierta alegría. No es que sea una minipimer pero se mueve bien. He de destacar lo extremadamente placentero de su coño, una pena no haberlo podido disfrutar más.

Paró, sin consultarme, y me empezó a pajear, constamente me "recriminaba" lo tardío de mi eyaculación. Le pedí 69 repetidamente y se hizo la loca, pero sí que le comí el chochito, el cual es, además de placentero, pequeñito, precioso y muy rico. Disfrutó bastante, pero de nuevo me cortó y volvió a pajear. Hasta este punto yo intentaba levantar el vuelo y tocarle la tecla pero ya me resigné y resolví que lo mejor sería correrme y adiós. La dejé que me pajeara (esto lo hace realmente bien).

Antes de quedar con ella le pregunté si aceptaba facial y me dijo que sí. A la hora de la verdad me dijo que en las tetas...Salió precipitamente de la habitación con un lapidario "bueno, ya está, cariño, ha estado bien". Mi reloj interno me decía que era muy pronto para esa frase y el de mi Samsung lo confirmó. Sin embargo, para hacerme pajas me las hago yo y ya tenía ganas de perder de vista a la mujer y pasé de discutir. Ella no hizo comentario alguno acerca de que quedaban 15 minutos largos.

La sensación que me dio es la de una mujer que se ha metido a puta por necesidad, pero que no le gusta nada, ni está preparada para ello, ni brinda un servicio mínimamente aceptable. Las veces que noté que disfrutaba, me di cuenta que ella paraba. Es como si se negara a gozar con un putero. Al igual que los besos, más que por repulsión me dio la sensación que más bien los negaba por pudor, ya que en alguna ocasión sí que su lengua recorrió juguetona mi boca y me mordió el labio.

Otro aspecto a destacar es su bajísima forma física. A pesar de que está durita, se cansa enseguida incluso en posturas pasivas para ella. La hice cambiar unas cuantas veces de postura y no lo llevaba nada bien, llegó a quejarse y llamarme indeciso jajaja. Acabó empapada en sudor y yo ni siquiera había carburado a pesar de llevar todo el peso de las operaciones.