Nombre de guerra: Mónica
Nacionalidad: española
Forma de Contacto: llamadas o WhatsApp al 683181425
Hilo profesionales: no, que yo haya visto. La encontré por aquí: [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ] Sí es la de las fotos, pero hay bastante retoque. Y quizá unos años más ahora.
Fecha aproximada: el pasado mes.
Lugar: apartamento en Cuzco.
Instalaciones: el apartamento es de lujo, una pasada. Quizá algo recargado para mi gusto.
Higiene: impecable.
Precio: 160€ una hora más 50€ de suplemento por griego.
Edad: me lo jugaría todo a que está cerca de los 50.
Cara: el paraíso del bótox. En los pómulos y en los labios seguro. Cierto aire entre Bárbara Rey y Leticia Sabater (lo digo en serio) ya con los cambios estéticos hechos.
Pelo: largo, liso, teñido de rubio.
Cuerpo: está muy delgada. Sobre 1.65 de altura. Piernas muy finas.
Pecho: tetas operadas, muy grandes, duras al tacto.
Culo: prácticamente plano y fofo, olvidaos de agarrar ahí.
Piercings y tattos: ningún tatuaje que yo recuerde ahora mismo. Un piercing en el ombligo.
Actitud: muy buena, implicada, agradable.
Conversación: bastante habladora, dicharachera, sin llegar a ser pesada.
Besos: hasta hartarte si quieres.
Fuma: sí. Pero elimina el olor de la boca con spray o colutorio.
Francés: normalito.
Forniqueo: es extremadamente flexible, la puedes poner como te dé la gana. Yo llevé más la iniciativa.
Griego: bueno. Dilata bien y aguanta bastante (tampoco soy un bestia en el tema).
Lo mejor: la implicación.
Lo peor: no hace ejercicio y eso se nota.
¿Repetir? No para mí.
¿Recomendable? Si te mola el rollo Ana Obregón desde luego que sí.
Valoración global de la experiencia: 6/10.
Relato: quedé con ella por WhatsApp un día antes. Una hora antes del encuentro confirmé la cita como me pidió y me dio la dirección de un exclusivo edificio en la zona de Cuzco. Al subir entré al apartamento directamente al salón. El apartamento es de lujo, con una decoración algo excesiva, pero ahí hay mucha pasta metida. Se me apareció con un vestido rojo ceñidísimo, bien maquillada y con unos taconazos de impresión. Pero para impresión la que yo me llevé. ¿Cómo? Años atrás quizá me hubiera ido, pero la situación me resultó hasta atractiva. Esta mujer pasa de los 45 seguro y tiene los pómulos y los labios bien retocados. Ni una arruga en la cara, pero expresividad escasa. En un primer momento me recordó a la Bárbara Rey con unos años menos. Me dio un beso en los labios y me ofreció algo de beber, pasando a charlar un rato en su salón. Ella estaba recién duchada, así que me dio una toalla limpia y me pegué una ducha mientras ella me esperaba en su habitación. Cuando llegué había colocado unas sábanas limpias y estaba preparada para la guerra. La fui desnudando poco a poco y empezó con el francés. No lo hacía mal, pero tampoco era muy excitante. Tras un rato así le pedí que se tumbara bocarriba para comerle el coño. Lo tenía rasurado por completo. La tía se iba estremeciendo y mojando poco a poco. También te deja meterle los dedos y pide y pide más. Siguió con el francés e hicimos un 69, para luego enfundarme el preservativo. La tuve arriba, abajo, de lado... Es flexible y puedes ponerla como te dé la gana. Al final la puse a cuatro y cuando noté que iba a correrme la saqué para empezar el griego. Me puso lubricante en el condón y poco a poco fui metiéndosela en el culo. Entró bien y al cabo de unos segundos empecé a bombear a tope, hasta que me corrí así. Apuré casi la hora. Vuelta al baño para mi ducha, dos besos y hasta otra.
En fin, una experiencia algo freak por el tipo de mujer que me encontré. A su favor tengo que decir que fue siempre amable, agradable, educada e implicada.
Un saludo.
P.D.: Ruego a quien corresponda que pueda subir las fotografías de su anuncio, ya que no soy muy ducho en estos menesteres.
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