Resúmen:- Nombre: Estrella
- Lugar: Alpedrete, cerca del ayuntamiento
- Fecha: principio de octubre de 2018
- Servicio: 1 hora/90€
- Francés: sí (sin)
- Griego: no
- Fuma: no noté nada
- Edad: >40
- Relación calidad/precio: 7/10, se implica y se deja hacer casi de todo, pero no creo que valga los 90€
- Repetiría: no
- Lo mejor: su culazo de negra brasileña; no está para nada pendiente de la hora
- Lo peor: el francés
Notas:
Antes del relato libre, dejadme que haga un par de anotaciones al comentario del compañero. En primer lugar, corregir el lugar donde atiende; ahora está en Alpedrete. En segundo, el horario: cuando la pregunté por el horario, no sabía nada de trabajar hasta las seis de la tarde. De hecho estuve desde las 17:30 hasta pasadas las 19:00.
Relato libre:
Igual que le pasó a Racord en Villalba, en Alpedrete también
se aparca regular. El sitio es un piso primero de una casa de dos plantas: un local vacío abajo y una vivienda arriba, a la que se accede por una escalera exterior. Si buscáis discreción es mejor que llevéis las típicas gafas con nariz y bigote porque cualquiera que os vea por esa escalera ya sabe de qué va el tema. Por suerte yo suelo ir pensando en otras cosas
. Según me comentó, comparte piso (y nada más) con otro hombre.
Después de llamarla, acuerdo con ella que estaré por allí alrededor de las 17:30 y no me pone ningún problema. Me da las indicaciones para llegar y me dice que cuando llegue, la avise por teléfono para dejar la puerta abierta. Total, que cuando estoy a diez metros de la casa empiezo a oír música: salsa, bachata,... qué se yo. Era música latina.
La aviso, subo las escaleras pensando que si este volumen es habitual, los vecinos deben de estar hasta las narices, y para dentro. El primero que me recibe es un
perrillo pequeñajo, que me ladra un poco y luego se va. Después llega Estrella. La muchacha es tal y como la describen: una
brasileña alta, pechos pequeños y un culazo grande, de los que piden ponerlos a cuatro.
pero no muy guapa de cara. Alegre, simpática y con ganas de hacerte pasar un buen rato. Me recibe con una batita transparente, una especie de falda o pareo de esos que solo llegan a mitad de la nalga, un tanga y un sujetador, todo de leopardo pero muy sexy
Nos presentamos, un poco de magreo, la pregunto por la ducha y otro poco de magreo.
Aunque intento que se venga conmigo al baño, no lo consigo. Me ofrece una cerveza y mientras las tomamos, nos ponemos con el negocio.
El folleteo no estuvo mal aunque a veces un poco
brusca para mi gusto. No me importa dar fuerte pero prefiero que si me montan, lo hagan más despacio. En total fueron tres asaltos que incluyeron:
comida de coño;
pajote en el culazo (lo mejor);
francés a pelo y hasta el final incluyendo, sin pedirlo,
garganta profunda; un poco de
beso negro también por cortesía de la casa; misionero invertido, otro rato
follando la boca y un buen rato empujando
a cuatro por detrás disfrutando de sus caderas.
Más Notas:
Lo del francés me defraudó bastante y seguramente sea esa la causa principal de que no vuelva. No es que lo hiciera sin ganas, que no fue así, si no que no me gusta notar los dientes.
Ojo con las ventanas: aún no hacía frío y estaban abiertas de par en par por toda la casa, incluso dentro de la ducha así que
si sois tímidos lo mismo no os gusta. Por mi parte a mi me dio mucho morbo así que no me importó agarrarla por detrás un par de veces en la cocina, al lado del balcón (abierto, como no).
Se pasó el tiempo que estuvimos juntos bebiendo cerveza. En lo que yo me tomé una, ella se bebió tres. No llegó a emborracharse, claro, pero ya sabéis que lo que entra por arriba acaba saliendo por abajo, así que después de cada ronda
se iba al baño a orinar. Si a alguno le gusta la lluvia dorada, aquí tiene una tormenta.
Se me ocurre que lo de la música a todo volumen quizás sea una señal para su compañero, algo como: “si oyes música desde la calle es que estoy trabajando, vete a tomar algo” ¿qué opináis?
Por último, comentar que estuvimos
más tiempo de la hora acordada sin ningún problema. Es más, creo que si yo hubiera querido (y podido) habríamos estado más tiempo y no habría puesto ninguna pega, así que por ese lado, muy bien.
Y ya está. Si habéis leído todo el mensaje, felicidades por vuestra paciencia; si no, al menos espero que os hayáis quedado con lo importante, que para eso lo he subrayado ;).