Ayer me di un masaje con Carmen. A pesar de que se anuncia con foto ([Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]), tanto en el anuncio como en el gabinete deja muy claro que el masaje no tiene nada de erótico ni por asomo, hasta el punto de que te pide que te dejes los calzoncillos y no llega a los glúteos. Sin embargo, sí trabaja pecho y vientre, y muy bien por cierto, como el resto del masaje, con maestría y pases muy agradables. Es una opción económicamente inmejorable: 25 euros por casi una hora con posibilidad de un 25% de rebaja si la recomiendas a otra persona.
Ella es más agraciada y joven de lo que parece en la foto, muy amable y tímida. Sólo dos pegas: demasiada luz y masaje demasiado aséptico, aunque quienes busquen un buen masaje descontracturante y demás habrán alcanzado el cielo.
El sitio está cerca de la M-30, entre la salida de la Avenida de la Albufera y la de Méndez Álvaro-Entrevías (por Avenida de San Diego). Yo aparqué a la primera, pero no muy cerca, y me temo que es difícil a cualquier hora, aunque ella dice que el coche se puede dejar en doble fila al lado de un Romeo que está averiado.