Escribo este relato con una intención meramente didáctica. Estoy convencido de que somos muchos más seres Virtuales de los que parecemos y espero poder evitar que caigáis en los mismos errores que yo cuando era inexperto. Os explico algunas cosas según se me vayan ocurriendo. A saber:

El mundo se divide en dos grandes grupos: los humanos y los inhumanos –todo lo demás-. Los humanos a su vez, se dividen en hombres, mujeres y enanos. Lo enanos son exactamente iguales que los humanos, pero mucho más bajitos –longitud variable-, con mucha más mala leche, también llamados niños. Estos no follan por lo que no son objeto de este estudio.

Los hombres a su vez se dividen en dos grandes grupos. Los que están follando en este momento y los que se mueren por estar follando en este momento.

Las mujeres también se dividen en dos grandes grupos: las que son lumis y las que no. Las lumis cobran por follar. Las que no lo son, follan poco y joden mucho. Es decir, te joden la vida, follan mucho menos, amén de ser mucho más caras. De esto último, te das cuenta siempre demasiado tarde...

¿Los inhumanos?... unos que cantaban aquello de “que difícil es hacer el amor en un simca 1000”, ¿recordáis?. También son todo lo que son explotados, saqueados, expoliados, exterminados, ridiculizados... y otros ados por parte de los humanos.

En mi ignorancia, al principio me materializaba en cosas inhumanas. Fuera preocupaciones. Solo pretendía follar como un animal. Primero fui de insecto. ¡Que asco!. Y es que no podía evitarlo... en cuanto veía algo que brillaba, cual joya, suculenta, espectacular, con excelente olor –para un insecto-, despertaba mis instintos... me atraía irrefrenablemente... y me pasaba el día comiendo mierdas y escupitinajos. No compensaba...

Luego en polilla. ¿Sabeis que bien joden las polillas?. Días y días ahí pegados. Pero me pasaba el día cual-amante-sorprendido-por-marido, dentro del armario. Y cada vez que “salía del armario”, cucal al canto... y muerto una vez más. No compensaba...

También en perro. A follar a discreción. Todas las perras son receptivas. El paraíso del sexo. ¿Cuál es el problema?. Pues veréis, te pasas todo el puto día oliendo culos de tus congéneres. Así, sin más, ni buenos días ni nada. Y de cada 65.536 olidas, -el 60% son de tu mismo sexo, asco- una está en celo. Justo en ese momento sublime, tu pene es un resorte. La metes. Bueno, siempre que puedas porque aquí sueles encontrarte el problema de que el 50% de las veces, o tu polla no cabe ahí – raza de perrita demasiado pequeña- o que tu polla baila ahí –raza de perrita demasiado grande-. Cuando todo va bien, el dueño/a de tu compañera que nunca está por la labor. Se lía a correazos contigo y tú ni puto caso. Cuando ya duelen mucho, ocurre. El dueño/a no comprende que tu pene a dilatado tanto, que ¡es imposible sacarla aunque quieras!. Y te corre toda la calle a cintazos y tu arrastrando a la perrita de tus partes por todo e barrio. Vida de perros. No compensaba...

Así que decidí materializarme en humano. Ser humano tiene dos grandes ventajas, el sexo es “racional” –consciente: fantasías, variaciones... - y el chocolate –puedes comerlo cada vez que quieras-. Si no te gusta el chocolate, doble ración de sexo.

Primero me convertí en mujer. A priori era estupendo. Follas con quien quieres, cuando quieres y como quieres. Fallé. No me corría ni a la de tres. Solo cuando me miraba en el espejo me excitaba. Incluso probé a materializarme en “Eva, alemana, 120 de tetas” e incluso en “Leticia Blonde”. Me maté a dedos frente al espejo. Eso es todo. Y nada de chocolate. No veáis como se acumula el hijo de puta en el culo, en la tripa, en las cartucheras... Y todo el tiempo que te pasas con la mierda del maquillaje, la pasta que se te va en “tuneos”... pero lo peor... lo peor... que no falla!!!, cada vez que te vistes de “clarito”, sin previo aviso... la cabrona de la menstruación!!!. Y como te pones!. Y los trucos que aprendes para disimular... Joder, como no vas a estar de mala leche cuando te baja la regla???. No compensaba...

Estaba claro que mis tendencias eran materializarme en un hombre. Y así lo hice. Primero en famoso. Esos follan mucho. Pues nada... en “Conde Lequio”. Fracaso total!!!. Pues eso, que la implicación de las pivas llega hasta el momento en que se piran los fotógrafos ya te han “robado” las fotos de la cita secreta. Luego siempre hay que adoptar posturas del perfil bueno, hay que tener mucho cuidado con los últimos retoques del cirujano –no besan en la boca porque se les explotan los labios, no se les pueden tocar las tetas que se deforman o duelen, igual que el culo, etc. etc.-. Al final terminas haciéndote una pajilla y fuera.

También probé con otros famosos, e incluso de deportistas como “David Beckham”, con idénticos resultados –exceptuando este último que además, terminaba muy cansado de correr en los partidos, además de tener que aguantar a la sargenta Victoria, que además, se mueve menos en la cama que el proceso de paz, además que no folla a pelo, además que no folla, “fecundación in vitro” para procrear... además de que no me deja comer chocolate- No compensaba...

Últimamente me estoy materializando en un tío de Valladolid. Feo. Viejo. Gordo. Soez. Maleducado. Y las cosas han cambiado... para muuuuuucho mejor. Que pibones me calzo, oye. Que polvos... ah!!!!, me inflo a comer chocolate y me importa un bledo.

Seguiremos informando. Consultas más íntimas por MP.




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Muy bueno ,si señor :roll: :roll: :roll:

La mejor 'materializacion' es la que cada uno elige, es decir aquella en la que más follas y comes chocolate libremente, yo también de momento puedo hacerlo y trato de calzarme cuanto más pivones mejor....

¡Que cierto!