Isabella 624591120

Nombre: Isabella
Nacionalidad: Se anuncia como española, luego explica que padre canario y madre Argentina.
Forma de contacto: whatsapp 624591120
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Hilo profesional: no tiene
Fecha: esta semana
Lugar: C/ María Zambrano, Ciudad Real
Instalaciones: Habitación grande con cama de matrimonio, sofá, mesa y tele. Muy cómodo el tema sofá para dejar la ropa.
Higiene: Ella perfecta, yo iba recién duchado (justo antes) y así se lo dije.
Precio: 50 € media hora, en mi caso 60 por el extra (explico luego).
Edad: se anuncia con 39, yo no soy muy bueno en esto, pero calculo que al menos 45.
Fotos: reales. La chica se cuida y está muy buena.
Cara: ni fú ni fa.
Pelo: media melena rubia.
Cuerpo: medirá 1,60 y muy bien proporcionada. Piel muy suave y agradable de tocar.
Pecho: buen par, operados pero muy bien puestos y disfrutones.
Culo: ni pequeño ni grande, muy proporcionado y bien.
Piercings y tatuajes: tatuaje en la espalda con un nombre propio de mujer (su madre, según me contó).
Defectos corporales: pelín de flaccidez en la barriguita pero nada.
Actitud: muy buena, simpática, agradable, se deja hacer y no pone pegas.
Conversación: sin problemas, hubo conversación cuando había que tenerla y bien.
Besos: bien y con lengua.
Fuma: no noté nada.
Francés: natural, ensalivado y hasta el final, con minuto de oro incluido. Espectacular. Este fue el extra que pedí (el francés hasta el final) y que me costó los 10 € más, pero mereció la pena.
Forniqueo: no hubo, en media hora sólo soy capaz de un disparo y me apetecía francés hasta el final.
Griego: no hace.
Lo mejor: las fotos son reales, cumple lo que dice y en el minuto de oro me sacó hasta la esencia.
Lo peor: nada.
Repetir: si vuelve por aquí, sin dudarlo (dijo que se queda hasta el domingo).
Recomendable: por mi parte sí, pero la próxima para 1 hora y probar forniqueo además del francés.
Valoración de la experiencia: 9

Relato:
Contacto por whatsapp por la mañana para quedar por la tarde, me dice que le confirme una hora antes. Confirmo, me da la dirección y a la hora convenida me planto allí, aviso por whatsapp y ella abre el portal y subo en ascensor. Nada más salir del ascensor me abre la puerta y me guía hasta la habitación. Lo que veo tras la puerta me gusta, una señora madurita de unos 45 años pero muy buen cuerpo, rubita y con lencería y taconazos.

Ya en la habitación confirmo (se lo había dicho por whatsapp) que quería el servicio de francés hasta el final en media hora sin penetración, por lo que me confirma el precio (60), pago y me desnudo. Cuando ya estoy en pelotas ella me anima a que la desnude a ella y así lo hago, desde atrás y dándole besos por el cuello al tiempo que voy sobándole las tetas (menudo par tiene) e imaginándome el hartazón de tetas que me voy a dar (así lo hice). Cuando ya estamos desnudos, ella me da aceite en el pene y restriega el culo con maestría contra mi miembro, poniéndome a mil mientras yo no puedo separar las manos de sus globos.

Me siento en la cama, la traigo frente a mí y me empiezo a dar el hartazón de tetas del que os hablé. Madre mía, qué par más bien puesto, estuve al menos 5 minutos de reloj comiendo, chupando y sobando, de una a la otra. A ella le hizo gracia y me dijo "pero qué golosón eres" riendo. Hacía tiempo que no me daba un homenaje de tetas así.

Ya tumbado, ella empieza a besarme por todo el cuerpo hasta que acaba en mi pene y empieza el francés. Muy bien hecho, salivado y sin olvidarse de los gemelos, a los que también dedicó su tiempo. Como veía que la cosa iba bien, le dije que se pusiera sobre mí para comérselo yo a ella también, y así lo hizo. Muy limpio y sin olores, y así empezamos el 69, se lo comí con ansia al tiempo que ella me la comía a mí, y cuando empecé a notar que me iba se lo dije "sigue así, sigue" y vaya si siguió, hasta que al fin me corrí y gracias a Dios cumplió lo pactado y no hizo como otras que se apartan en el último momento. No sólo me corrí en la boca sino que luego siguió chupando durante al menos un minuto, dándome un orgasmo como hacía mucho que no tenía. Espectacular, sí señor.

Me limpió con toallitas y luego se fue ella al baño a limpiarse y enjuagarse la boca. Al volver, como aún quedaba algo de tiempo, me ofrece darme un masaje, a lo que accedo encantado. Cinco minutos de masajito mientras charlamos un poco de la vida, de lo caro que está todo, de la familia, etc. Después me visto, dos besos y me voy.

Muy buena experiencia con una chica que cumple lo que pacta y que está muy buena.

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