Hola, hace algo más de un mes, llamé a una tal Jimena, en la zona de plaza de castilla / capitan haya 51, en el anuncio incluye unas fotos y una información más falsa que ella:
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Resulta que no es española, sino sudamericana, no tiene 28 años, está más cerca de los 40 que de los 30, y no es la chica de las fotos, al menos no en la última década.
Os cuento mi experiencia:
Concreto la cita por 80 euros una hora, llamo al llegar al portal que por cierto está algo escondido y hay que atravesar una finca. El portal tiene portero, por suerte no me lo crucé ni al subir ni bajar pero tenía allí sus cosas.
Subo, me abre la puerta y vaya susto!! una tía entrada en carnes pero que parece maja, al oirla hablar estuve a punto de irme, al ver que de española nada, pero como estaba más caliente que una mona decido quedarme y a ver que tal.
Paso a una habitación a través de un salón muy muy tétrico, y me encuentro en un cuarto sin ventanas, con un gran armario dos camas juntas muy incómodas, suelo de moqueta viejísima y una cortina. Me dice que me ponga cómodo y se va a prepararse y guardar mis malgastados 80 euros. Tras quedarme en calzoncillos decido satisfacer mi curiosidad y abro la cortina y tras comprobar que hay dos, dicha cortina conduce a otro cuarto con otra chica en tanga delante de un ordenador chateando.
Al rato llega Jimena y se baja de los taconazos y empieza el tema:
Se sienta en la cama me quita los calzoncillos y tras limpiarme con una toallita humeda empieza a chupar como una descosida, no muy bien por cierto.
Como no me gustaba le digo que se tumbe y la desnudo... ahi ya me dije: ¡¡a qué hora se me ocurriría llamar a esta tía!! unas tetas pequeñas como deshinchadas, con tripa y muy rara por cierto, me resulta hasta dificil describirla. El chocho con un poco de pelo, como a mi me gusta pero nada atrayente. Tras ponerme el condón empezamos el folleteo, le pone ganas pero no me gustó nada, llegó un momento que quise parar porque eso era deprimente, le digo que me la chupe, como tampoco es muy buena en ello, acaba haciendome una paja y echandoselo su pecho.
Ya que me había hecho sudar de lo lindo para conseguir hacer algo que no pude terminar le dije si nos duchabamos juntos, la verdad es que para verla un poco la cara, porque la luz tenue roja de la habitacion me daba hasta sueño.
Ya en el baño, tras una ducha de agua ardiendo, porque a ella le gustaba así, con 30 y tantos grados en la calle, apetecia mas bien fria volvemos al cuarto, miro al reloj y faltan algo mas de 15 minutos, le digo que me de un masaje porque habia elegido una hora y la tía me quería echar ya.
Me da un masaje de 5 minutos escasos y me dice que ha pasado el tiempo, cuando faltaban mas de 10, como estaba a disgusto me largo sin discutir, pero de mala leche.
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