Bueno, pues yo sí que estoy en condiciones de aportar datos, porque me he pasado a verla hace nada de tiempo.
La tenía en el punto de mira desde hacía tiempo, antes indicaba que tenía un piso en una urbanización al norte de las 4 torres de Chamartín, pero aunque era tentador no la llamé entonces porque en transporte público era complicado llegar. Sin embargo, ha cambiado recientemente de ubicación y ahora trabaja en el cruce entre la calle Alfonso XIII y la avda. Ramón y Cajal, que me venía bastante mejor, así que me he acercado.
Se trata de un chalet que desde fuera parece bastante decrépito, pero que al entrar se descubre como un moderno lupanar, muy bien acondicionado y en perfecto estado. Me atiende la que supongo gerente del local, una señora en la cincuentena que me indica que me va a presentar a Nuria y a otra compañera suya.
Tardan un poco más de lo normal en aparecer y con ellas la primera sorpresa, ya que me presentan como Nuria (que según su anuncio es española de 23 años) a una chica que posteriormente me dijo que era rusa y tenía 28, aunque llevaba desde adolescente en España (habla español perfectamente, aunque con acento ruso, claro), quizá es española por haber obtenido la nacionalidad, yo que sé. Teñida de un rubio dorado (morena de origen), de estatura media, con un tipazo tremendo, sin un gramo de grasa, tonificada y delgadísima de hacer deporte y con unos pechos tuneados algo mayores que la 90 b. De cara es muy guapa pero creo que también está tuneada porque su nariz es demasiado perfecta. No tiene tatuajes ni piercings (que yo recuerde) y, en general, tiene cierto aire a gogó de discoteca, o quizá de chica de lujo de las que uno se encuentra en zonas turísticas como Ibiza o Marbella. Yo no creo que sea la Nuria de las fotos, el feeling que proyectan las fotos de su anuncio es completamente diferente al de la chica que te encuentras, que no está nada mal, pero no es lo que yo buscaba. No puedo garantizar al 100% que no sea ella, pero estoy seguro al 90%.
La otra chica era morena, probablemente rusa, delgada y atractiva, pero ninguna de las dos eran mi tipo (me gustan con menos pinta de profesional) por lo que estuve a punto de irme, de hecho se lo comenté a la madame y me dijo que sí que era ella, pero que se había teñido el pelo. Al no tener plan b me quedé media hora con la supuesta Nuria (las tarifas son 80/120). Otra vez me tocó esperar un buen rato, casi diez minutos y por fín apareció.
En resumen, chica conocedora de su profesión, pero que no da besos con lengua, el francés es "con" y no puedes meterle dedos, así que bueno, acabé bien pero fue una experiencia del montón, sobre todo porque no era mi tipo de chica, por los reparos (anteriormente indicados) que puso la chica, por los pechos tuneados (que estaban muy bien construídos y eran muy bonitos, pero es que a mí no me gustan los pechos tuneados) y sobre todo, por el uso de lo que estoy
prácticamente seguro de que eran fotos falsas. No repetiré.