Daniela- 611318640

Jamás he vivido una experiencia como ésta. Aún estoy en shock.
Nombre: Natalia
Nacionalidad: latina
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(Fotos tan reales como un billete de 3´40€)
Lugar: Valladolid, Recoletos junto a Campo Grande
Instalaciones: edificio viejo
Higiene:
Precio: 60€-30 y sucesivos
Edad: treinta y muchos me pareción
Físico: mujer atractiva de pecho flácido
Actitud: entre pasé miedo y flipe demasiado
Conversación: poco y casi que lo lamenté
Besos: sólo picos
Fuma: sí
Francés: con
Griego: con suplemento
Lo mejor: es algo entregada
Lo peor: todo lo demás
¿Repetir? Antes prefiero que Hitler resucite y haga un exterminio global
¿Recomendable? Jamás
Valoración global de la experiencia: -1000

Relato: atiende con mucha simpatía. Al llegar, tarda en abrir un rato, teniéndome al teléfono. Como el vestíbulo está en obras, te guía desde la puerta para que sepas llegar por su voz. Te recibe con una sonrisa, bien, en ropa interior, mejor porque tiene buen físico. Te cobra y desaoarece cinco minutos. Luego te lleva a una habitación donde el término desordenada ya ha perdido todo su valor, hasta ví preservativos usados de otros clientes tirados por el suelo, lleno de bolsas, ropa tirada. Yo no soy muy ordenado pero al lado de esa habitación grande, mi casa es el cúlmen del perfeccionismo.
Empieza el asunto y en principio, bien, es algo entregada y la mamada es buena, aunque sea con.
Yo cogí cuarenta y cinco minutos y justo justo, repito, justo justo antes de empezar la faena, miré la hora para evitar problemas. Terminamos el primer asalto y nos echamos sobre la cama, ella se pone con el whatsapp a chatear y yo, pues bueno, pues vale, estaba recuperándome del primer round. Un poco de charleta que me empieza a mosquear lo que la lleva a ponerme un vídeo de facebook en su móvil repitiéndome que tengo que verlo, que todos los humanos somos uno, que somos dioses, y no se qué mierdas más. El vídeo es de una chica sudamericana explicando cómo organizar un genocidio matando a todos los seres vivos, cómo envenenar la comida, cómo torturar a los niños y bañarnos en su sangre. Os lo juro. De verdad, os lo juro. Hitler, Stalin o Pol-Pot al lado de esa mujer del vídeo era Jesucristo, Ghandi o Teresa de Calcuta.
- ¿Pero de qué está hablando?
- Del nuevo orden mundial. Estás dormido. Piensa en ello. Ve el video. ve el vídeo.
- Pero que está hablando de matar niños.
- Es que nos controlan.
- ¿Nos controlan? ¿Quiénes?
- LOS EXTRATERRESTRES.
Os juro que es la primera vez que pasé miedo de verdad, estaba terriblemente asustado. ¿Dónde leches me había metido? Porque lo decía en serio. Estaba convencida. No lo decía por burlarse, hacer una broma o dejar que corriese el tiempo...
Me vio la cara y me dijo que me vistiera porque ya había pasado el tiempo. Miré el reloj y la dije que no, que faltaba un rato. Me dice ella que no, la digo que sí, que miré el reloj antes de empezar.
- ¿Viste la hora? (su cara era un poema).
Y tan pancha, de inmediato, coge el teléfono y se pone a hablar con otra persona. Yo ya estaba de muy muy muy mala hostia, pero también asustado. Porque lo del vídeo y eso no lo dijo para que me fuese, estaba total y absolutamente convencida y creía en esas palabras que llamaba al exterminio y a destruir a los hombres y a caparlos y a...
Total, que me vestí a toda velocidad y escapé. Gasté demasiado en un fornicio que no costaba ni la mitad porque ni loco quería permanecer junto a esa persona ni un segundo más. Temí por mi integridad, aparte del monumental cabreo que tuve.
Ni os acerquéis.