Nombre: Erika y Bárbara.
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Dirección: Calle Caballeros, cerca de la estación de autobuses.
Tarifa y duración del servicio: 120 euros, media hora
Fecha: Bastante reciente
Fumadoras: No noté olor a tabaco.
Tatuajes: No
Descripción física: Las dos son chicas jóvenes, delgadas y con tetas operadas. Para mi gusto Bárbara es guapa pero Erika es un pivonazo. Las fotos de la web os indican que os vais a encontrar.
Besos: Con lengua y en cantidad.
Descripción del servicio:

Llame a Erika para informarme de sus servicios y tarifas y al preguntarle si realizaba trios (en este caso fue dúplex) me dijo que lo hacía pero solo con una amiga suya, al preguntar quien era me dijo que Bárbara (con la que ya había estado) y me decidí a probar.

Al llegar al piso me abrió la puerta Bárbara y me recibió con un buen morreo con lengua y una sonrisa de oreja a oreja; llevaba un conjunto de lencería negro muy sexy y me llevo a la habitación donde esperaba Erika con un vestido verde ajustado que dejaba ver su cuerpazo brasileño. Comencé a morrearlas y a meterles mano a las dos, después besaba a Erika mientras Bárbara me comía el cuello, hicimos un pequeño alto para poder desnudarme mientras ellas preparaban la cama. Me duché (hubiera sido un puntazo que una de ellas por lo menos me acompañara) y al volver Bárbara se agacho y empezó a comerme la polla mientras besaba y tocaba el cuerpo desnudo de Erika, luego me tumbé y las dos empezaron a lamer mi polla pero pronto Erika comenzó a comerme los huevos y a jugar con su dedito y su lengua en mi culo mientras Bárbara se metía todo mi rabo en su boquita glotona. Erika dejó de lamerme los huevos para coger un condón, ponerse de espaldas y cabalgar mi polla y la vez le pedí a Bárbara que pusiera su coño en mi boca para comérselo. Después de unas cuantas embestidas me corrí de lo caliente que estaba pero Erika meneó su precioso cuerpo unos cuantos segundos más en mi polla llena de leche calentita. Estuvimos los tres tumbados en la cama besándonos a tres lenguas y ellas dos jugaron un poco con sus lenguas y se dieron un morreo. Erika Bajo a mi entrepierna para resucitar a mi soldadito y unos segundos después fue Bárbara para ayudar. Cuando dos zorras te comen el rabo el tiempo de recuperación es mucho más rápido. Bárbara me enfundo el capuchón y la monté a cuatro patas; Erika me metía suavemente su dedo en el ojete pero al cabo de un rato le dije que pusiera a mi lado para besarla y frotarle el chochete con mi mano. Luego Erika le comió un poco las tetas a Bárbara y volvió a mi lado; le pedí que le diera un par de cachetes a Bárbara y después de estar un rato jodiendo su rico coño me corrí como un perro (está segunda vez aguante más).

Al acabar ya había pasado la media hora, duchita, morreos de despedida y a casa con una sonrisa de oreja a orejas.

Es verdad que en el primer polvo me corrí rápido pero creo que nunca aproveché tanto media hora de servicio, la verdad es que se esmeraron en dejar mi rabo seco.

Conclusión:

En mi humilde opinión creo que es una experiencia que merece la pena. No fue un trío lésbico pero hubo cierta interacción entre ellas y se notaba que se llevan bien y que estaban cómodas.

Saludos.

Si tuvieras que elegir una con cual te quedabas?