Camila Lactante
Buenos días camaradas. Llevaba un tiempo observando los anuncios de esta profesional como independiente, y tras su fichaje por una conocida y reputada casa de Marques de Riana, decidí a quedar con ella.
Nombre: Camila
Edad: 28 años creibles
Lugar: Oporto
Nacionalidad: Venezolana. Aunque tiene un acento bastante peculiar...
Instalaciones: Apartamento por horas
Contacto: 603582215 (whatsapp)
Fecha: Hará un par de semanas
Tarifas: 80 euros/1 hora (apartamento incluido)
Francés: Natural. Normal. La chica le pone interés, pero no es su punto fuerte
Griego: No pregunté, pero no lo anuncia.
Implicacion: Buena. Le pondría un 7. Besos más bien robados...
Físico: No diría que es fea, pero guapa tampoco es. Desde luego no es de mi gusto. Pequeña (alrededor de 1,60).
Pecho: Un poco feo. Muy desiguales y muy muy caido. Eso si, rebosantes de leche
Repetiria: No
Lo mejor: La chica intentá agradar pero... La chica es maja, pero en las fotos te imaginas una cosa, que difieren bastante de la realidad (no dudo que sean sus fotos, pero desde luego muy retocadas y de hace muchos años)
Lo peor: Los pechos, que hacen que los descartes a pesar de que pagas por disfrutar de su leche.
Experiencia:
Eran las 21:00 y todavía estaba en el trabajo. Me decido a escribirla por whatsapp y me contesta al instante.
Me comenta que de quedar tiene que ser en Oporto y me indica su tarifa. Acordamos vernos a las 22:15 por allí y me escribe a las 22:00 que la habitación no se queda libre hasta las 23:00.
Como ya tenía la idea en mente, acepto y me hace ir a recogerla a Carabanchel, para posteriormente ir juntos al apartamento de Oporto.
Llegamos, nos tomamos una coca-cola y se empieza a desnudar.
Se sienta en la cama y empieza con el francés, al rato me tumbo en la cama y juego con sus pezones sacándoles toda la leche que puedo y llenándome el cuerpo y a mi amiguito con ella. Le digo que me lama y lo hace sin poner ninguna pega.
Tras esto, comenzamos con el folleteo y termino el asalto de esta manera.
Ducha por separado (debido a la dimensión del plato de ducha), y un poco de charleta. No había pasado más de 45 minutos cuando empecé a vestirme porque no me estaba sintiendo muy a gusto por el sitio.
La volví a acercar con el coche a su casa, un trayecto muy ameno ya que habíamos cogido más confianza.
Un saludo
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