Conejitas en Plaza de Castilla
 

Hola a todos,

NOMBRE DE LA CHICA: Yurima.
DIRECCION: C/ Capitán Haya (muy cerca de Plaza de Castilla).
TELÉFONO: 688470444
HILO DE PROFESIONALES: [Only registered and activated users can see links. Click Here To Register...]
FECHA: Esta semana.
TARIFA: 80€/hora.
¿FUMA?: No creo.
NACIONALIDAD: Boliviana.
EDAD APROXIMADA: 19 añitos.
DESCRIPCIÓN DE SU ROPA: Sexy; top y faldita muy corta vaquera; sandalias de tacón.
DESCRIPCIÓN DE SU FÍSICO: guapa; aspecto inocente; piel morena; pechos medianos y culazo; delgada; depilada aunque con matita de pelo que corona su sexo; 1’60 sin tacones; sexy, dulce, sumisa y muy tranquila. Las fotos que aparecen en el hilo de profesionales son suyas.
TATUAJES: No recuerdo.
FRANCÉS SIN: Sí, pero sin pasión y sin presión. Me dio la sensación de que no le gustaba. No hasta el final.
GRIEGO: Intenté profundizar con un dedo y me dejo claro que no le gustaba que le estimulasen el esfinter... va a ser que no.
BESOS EN LA BOCA: tampoco se prodiga. Hubo pero no con pasión. Mis besos en su cuello y orejitas sí que le gustaron; la ponían cachonda.
IMPLICACIÓN: Buena.
VALORACIÓN DEL SERVICIO: Aceptable.
¿REPETIRÍAS?: No creo.


Las teen son mi perdición, así que decidí visitar a Yurima.

Instalaciones del piso, suficientes. Eché de menos espejos en la habitación. Cama grande a la que puso una sábana. Cuarto de baño limpio y toalla limpia y suficientemente grande.

Tras pasar ambos por el baño (por separado) ella vuelve vestida... así que me toca desnudarla poco a poco. Voy descubriendo sus pechos que acaricio, beso, lamo. Bajo su faldita y comienzo a saborear su sexo a través de su braguita. Finalmente, ya desnuda, con sus tacones puestos (los tuvo toda la cita) disfruto de su coñito y mi lengua consigue que se retuerza, que jadee, que contraiga sus piernas; lo estaba pasando en grande.

Le llegó el turno y, mientras yo acariciaba su perfecto culo y su chocho, comenzó a comerse mi polla pero dada su falta de maestría me puso una goma y comencé a empujar.

Misionero muy largo, algunas posturas más hasta que me falta fuelle , para recuperar fuerzas, mientras me la meneo su lengua se encarga de mis pelotas. Me la pone a tono y le pido que se ponga de pié y se apoye e la cama. Esa visión, ella con sus tacones, agachada sobre la cama, esperándome, me la puso aún más dura.

Aquí le di ya toda la caña y ella jadeaba sin parar. Se amoldaba a cada petición: Después de un rato le junté las piernas para aumentar el roce; mientras la sujetaba de los hombros o le agarraba los pechos... ese culazo, sus gemidos, me corrí.

Después charlamos un rato, ducha y para casa.

Saludos