Iniciado por jokinicp

Tenía intención de quedar con Natalia pues ya la conocía de cuando hacía lésbicos en Plaza de Castilla a precios moderados y tenía buen recuerdo de la experiencia.

Lo malo es que, por un fallo en su agenda o por error mío por no confirmar, la situación devino en un despropósito y me explico.

La escribo por Whatsapp unas 27 horas antes de la cita para ver disponibilidad y me mando unos audios con sus servicios y me dice que está pendiente de que un cliente le confirme. Al cabo de unos 20 minutos me confirma que está disponible.

Estando en el metro, cuando faltan 23 horas, 50 minutos para la cita, me manda un audio, que por discreción por estar rodeado de gente, no escucho y a los 5 minutos otro.

Una vez que salgo del metro, y ya con tranquilidad oigo los audios. En el primero me dice que que falta de formalidad, que no puede estar esperando a gente impuntual porque tiene la agenda repleta y no va retrasar al siguiente cliente. Resulta que había tomado nota de la cita para ese mismo día y no para el siguiente como le había pedido.

Y lo mas surrealista me ocurre al escuchar el segundo audio donde me dice que ha pasado mi numero a la Guardia Civil para que no le vuelva a hacer eso a ninguna chica. Claro, la GC no tiene otra cosa que hacer que perseguir a gente que falta a la cita de una lumi.

Intento contactar con ella para explicarle que se ha equivocado de fecha, pero me había bloqueado.

Puedo entender que haya perdido un cliente, que sea también fallo mío por no confirmar que había tomado nota de la fecha correcta, pero lo que creo que no tiene un pase es que encima de su error me amenace